La Fiscalía de la Delegada ante la Corte Suprema de Justicia de Colombia ha iniciado una indagación en torno a presuntos actos delictivos en los que habría incurrido el Brigadier General John Jairo Rojas Gómez durante su desempeño como comandante del Comando Conjunto No. 2 Suboccidente del Ejército.
El alto oficial se encuentra en el centro de una investigación que abarca una serie de presuntas actividades irregulares de carácter operacional, administrativo y personal que habrían tenido lugar durante su mandato. En este contexto publicado recientemente por la Fiscalía, se han establecido tres líneas de acción fundamentales.
La primera línea de investigación está relacionada con posibles actos de corrupción en el ejercicio de su cargo en Argelia, ubicado en el departamento del Cauca. Según las pesquisas, el Brigadier General John Jairo Rojas Gómez habría mantenido vínculos con la estructura Diomer Cortés de la Segunda Marquetalia.
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La segunda línea de investigación se centra en denuncias de acoso sexual presentadas por varias oficiales del Ejército. Las víctimas alegan haber sido objeto de acoso sexual durante el período en que el Brigadier General estaba al mando de la unidad militar.
La tercera línea de investigación apunta a posibles acciones de favorecimiento a organizaciones criminales. De acuerdo con las pruebas recopiladas por la Fiscalía, el oficial habría permitido el desarrollo de corredores de movilidad y operaciones de narcotráfico en el departamento del Cauca. Estas acciones delictivas supuestamente han tenido un impacto negativo en los esfuerzos de las autoridades para combatir a grupos ilegales en la región.
La apertura de esta investigación ha generado un gran interés en el país, ya que involucra a un alto mando militar en presuntos actos que socavan la integridad y el buen nombre de las Fuerzas Armadas colombianas.
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