El pasado 20 de abril, a través de un comunicado, Mercadería S.A.S, matriz de la cadena Justo & Bueno, anunció la llegada del fondo chino JFC (Joining Futures Capital International Limited) como su nuevo dueño, el cual se encargaría del pago de deudas a sus acreedores para evitar el ‘fantasma’ de la liquidación. Sin embargo, los recursos no llegaron y, cumplido el plazo para ponerse al día en sus pagos, la Superintendencia de Sociedades ordenó la liquidación inmediata de la cadena.
No obstante, a pesar del incumplimiento, y de que ya empezó el proceso de empalme con el liquidador, JFC continúa, sobre el papel, en fila para ser aprobado en una eventual reorganización ante una nueva oportunidad concedida por un juez para acoger a la empresa bajo el artículo 6 de la Ley 560, como instrumento de salvamento en los próximos 30 días.
De esta manera, el acuerdo de compra se mantiene y se espera las aprobaciones correspondientes para concretarse, frente a lo cual Justo & Bueno ve con beneplácito la oportunidad del juez para acoger a la empresa al artículo 6 de la Ley 560 de reorganización, ya que esto permite una nueva oportunidad de salvamento en los próximos 30 días. Por ahora, la cadena lo presentó como un fondo chino creado en 1990 que realiza inversiones alrededor del mundo en compañías con enfoque social dentro de segmentos de tecnología, agricultura, consumo masivo, infraestructura y desarrollo de tierras.
Por su parte, JFC se presentó como un fondo de capital privado, que “invertimos en empresas y proyectos con amplio potencial de crecimiento orgánico, económico y corporativo. Nuestra filosofía de inversión se basa en la necesidad de incrementar el valor de los emprendimientos y maximizar su posición estratégica, logrando economías de escala necesarias para convertirse en líderes mundiales en su sector”.
Asimismo, recientemente La W dio a conocer detalles del fondo chino, que, aunque fue registrado en Hong Kong su director es un colombiano que vive en Shenzhen llamado John Jairo Flórez Ospina y cuya accionista es María Fernanda Lazo y tiene activos registrados por más de 3 millones de dólares. En el momento, Justo & Bueno sigue confiando en que los recursos lleguen para pagar las deudas que ascienden a 281 millones de dólares (el pasivo reorganizable), antes de que el proceso de liquidación culmine.