“En nombre del Centro Democrático les expreso que nosotros apoyamos, validamos, respetamos la protesta social, que la hemos ejercido, y sin vandalismo, pero rechazamos la violencia”, sostuvo el exmandatario como representante de su bancada en el Congreso.
El expresidente agregó que “es igual el dolor de la familia de Lucas Villa, asesinado en Pereria, que el dolor de la familia del capitán Solano, asesinado en Soacha”, sobre las manifestaciones y muertes violentas que han ocurrido en medio de las manifestaciones que vive el país.
Sin embargo, emprendió fuertes críticas en contra de los indígenas del Cauca y presumió “legítima defensa”, luego de que presuntos civiles armados atentaron contra esa comunidad en el sur de Cali, capital del Valle del Cauca, que ha sido calificado como un hecho de paramilitarismo.
Respecto a la situación que se presentó el pasado 9 de mayo en Cali, el expresidente aseguró que “hubo hechos que podrían ser de legítima defensa”, porque según él la “ciudadanía acosada por la acción vandálica esperaba que llegara la fuerza pública a socorrerla y no llegó”.