La Misión de Observación Electoral solicitó que se hagan públicos los criterios que serán tenidos en cuenta para definir los nuevos puestos de votación en las zonas rurales.
Para la MOE, uno de los mayores retos del Gobierno nacional es generar todas las garantías de seguridad para que los candidatos puedan hacer proselitismo electoral en las 16 circunscripciones transitorias.
Alejandra Barrios, directora de la MOE, asegura que ahora que se retoma la elección de las curules para las víctimas del conflicto, uno de los puntos del Acuerdo de Paz que más rechazo tuvo de parte del partido de gobierno, actualmente en el país no se cuentan con las condiciones necesarias para que en algunas zonas rurales del país se realicen los comicios de forma segura, debido a la constante amenaza de grupos armados ilegales.
«Lamentablemente lo que ha hecho carrera en el país es creer que quienes van a ocupar esas curules son bandidos y que son aliados de los grupos armados ilegales y del narcotráfico», comentó.
Barrios afirma que es hora que desde Bogotá se aumenten los esfuerzos para ampliar la capacidad logística de inscripción de cédulas en estos sitios: «Nos acomodamos a pensar que la logística electoral solo se hacía en las zonas urbanas y este ejercicio nos ha hecho entender que hay un país rural al que se le deben garantizar la seguridad electoral».
Además, enfatizó en la financiación de las campañas políticas para acceder a las Circunscripciones de paz, en la medida que la regla fijada exige que la autoridad electoral entregue los anticipos equivalentes al 50% del resultado de multiplicar el valor del voto a reponer por el número de personas que integran el censo electoral de la respectiva circunscripción.
