El Parque Santander, considerado el corazón de Neiva, se ha transformado en el hogar de numerosas personas en situación de calle, creando un panorama complejo que confrontan diariamente los habitantes de Neiva que transitan por esta zona. Según las estadísticas proporcionadas por la personería de Neiva, se ha registrado un total de 608 habitantes, siendo notable que el 90 por ciento de ellos se concentran en la Comuna 4.
Diario del Huila, Panorama
El pintoresco parque Santander de Neiva, que solía ser un punto de encuentro y recreación, se enfrenta a una dura realidad con el aumento alarmante de habitantes en situación de calle. Según estadísticas recientes, en la ciudad, en la comuna 4 existe un registro de 608 personas en esta condición. Este fenómeno complejo no solo afecta la apariencia del centro de la ciudad, sino que también refleja las profundas problemáticas sociales que aquejan a la comunidad neivana.
Caminar por el Parque Santander se ha convertido en un ejercicio de sensibilización, con malos olores y la presencia constante de personas durmiendo a la intemperie, generando un malestar palpable entre los visitantes y residentes locales. Las quejas sobre la persistente mendicidad y la agresividad de algunos habitantes de la calle al no recibir limosnas son moneda corriente en la zona.
Detrás de estos rostros cansados y desesperanzados, se esconden historias de desafíos personales, adicciones y situaciones familiares difíciles. René Jiménez, secretario de Desarrollo Social e Inclusión de Neiva, señala que el 80 por ciento de los habitantes de calle no son originarios de la ciudad, pero se han quedado debido al ambiente y la generosidad de la comunidad.
Jiménez destaca los esfuerzos de la secretaría para abordar esta problemática. Con aproximadamente 600 habitantes de calle registrados, el 90 por ciento de ellos son consumidores de estupefacientes.
La secretaría cuenta con la Casa Habitante de Calle que brinda segundas oportunidades, ofreciendo techo, alimentación y apoyo psicosocial a aquellos que han decidido abandonar el mundo de las drogas. Además, se está trabajando en un programa para llegar a las aulas de clase y prevenir la deserción escolar y el consumo de sustancias psicoactivas entre los jóvenes.
Adultos mayores
Por otro lado, el secretario resalta la necesidad de abordar la situación de los adultos mayores en situación de calle, algunos de los cuales utilizan el subsidio de Colombia Mayor para el consumo de drogas. La secretaría trabaja en llevar a estos adultos mayores a centros de salud y ampliar los cupos para que puedan pasar su vejez en un entorno más digno. Sin embargo, su adicción a las drogas, los lleva a mal gastar el dinero que el Estado les provee para su vejez digna.
En cuanto a los menores de edad en situación de calle, Jiménez señala que el rango de edades ha aumentado, con preocupación por el incremento de menores de edad. Asimismo, se evidencia que el rango de edades de personas en esta condición está especialmente entre los 25 y 40 años. El 80 por ciento son hombres, lo que agrega una capa adicional de complejidad a la situación.
En cuanto a la permanencia de los habitantes de calle en el Parque Santander de Neiva, René destaca con claridad que la legislación colombiana establece que nadie puede ser forzado y que la decisión de permanecer allí debe ser libre y voluntaria, en caso de que decidan acogerse al programa de rehabilitación las puertas están abiertas. Sin embargo, identifica un inconveniente fundamental al señalar que esta problemática no recae únicamente en la esfera de responsabilidad de las autoridades, sino que también implica a la ciudadanía.
El problema se intensifica en el centro de Neiva, donde muchas personas desechan basura en horarios inapropiados, brindando una oportunidad para que los habitantes de calle realicen actividades de recuperación. La necesidad imperante es mantener una organización rigurosa en la gestión de residuos para evitar que estas personas dispersen los desechos. La colaboración de todos es esencial para mejorar la apariencia y condiciones del Parque Santander.
El secretario de Desarrollo Social e Inclusión de la ciudad de Neiva también hace un llamado a las fundaciones que trabajan con la población en situación de calle y proporcionan alimentos. Señala que ha surgido un problema significativo, ya que muchos de los beneficiarios toman la comida, pero posteriormente descartan los platos, contribuyendo a la contaminación en las áreas cercanas al río.
Para abordar este desafío, propone desde la Casa Habitante de Calle, ubicada diagonal a la Avenida Circunvalar, ofrecer sillas y menaje a fin de mejorar la disposición adecuada de estos elementos y reducir el impacto ambiental negativo.
La colaboración activa de todas las partes involucradas es esencial para gestionar eficazmente esta problemática y promover un entorno más saludable y ordenado en el Parque Santander.
Trabajo articulado
El personero de Neiva, Wilson Díaz Sterling, proporcionó detalles específicos al destacar que, al concluir el mes de octubre, se registró un número considerablemente superior a 608 habitantes en situación de calle, principalmente en la Comuna 4.
Entre ellos, se observa una división entre aquellos que son residentes permanentes en la ciudad de Neiva y aquellos que son nómadas y eligen llegar a la ciudad durante las festividades de San Pedro y diciembre. La elección de Neiva como destino se ve influida por el clima cálido de la ciudad, que proporciona un refugio más acogedor para estas personas.
Es crucial resaltar el esfuerzo y compromiso evidentes en la Casa Habitante de Calle, donde se brinda acceso a servicios y programas de rehabilitación para aproximadamente 35 personas. Este enfoque no solo apunta a abordar las necesidades inmediatas de quienes se encuentran en situación de calle, sino que también representa un paso significativo hacia la reintegración y la mejora de su calidad de vida.
