Por: Harold Salamanca
Las elecciones legislativas que tendrán lugar el próximo domingo 13 de marzo, permitirán que los colombianos elijamos los miembros de senado y cámara, para el periodo constitucional 2022-2026. Para el Senado de la República serán elegidos 108 senadores, y para la Cámara se elegirán 188 representantes. Según información de la registraduría Nacional del Estado Civil, para esta jornada se han dispuesto 112.000 mesas, en 12.500 puestos de votación, para atender un potencial electoral nacional de 38.8 millones de ciudadanos habilitados para sufragar.
La gran expectativa de la jornada, además del número de curules que alcanzará cada partido tanto en senado como en cámara, y del pulso de poder que medirá fuerzas y definirá alianzas para la contienda por la Presidencia de la República, es que por fin se conocerán los candidatos por cada una de las consultas interpartidistas: Equipo Colombia, la coalición Centro Esperanza y el Pacto Histórico, y los ciudadanos descansaremos de los inagotables, inútiles y penosos debates que tuvimos que soportar por casi 6 meses.
La jornada reviste gran importancia para el futuro del país, pues de la conformación del legislativo (Congreso), dependerá en gran medida la velocidad en el tramite, la acogida y la aprobación de las iniciativas del nuevo gobierno, y de igual manera el tinte, la línea ideológica y los temas que contendrá la agenda legislativa a desarrollar especialmente en temas económicos, como la ineludible reforma tributaria, sus alcances y énfasis, en los temas sociales, la definición de la política de subsidios a las personas más vulnerables, que generan grandes debates frente a la sostenibilidad fiscal, y por supuesto la senda que seguirá la educación en nuestro país.
Este proceso electoral como ningún otro reviste la mayor importancia, por la polarización que vive el país, alimentada desde cada una de las orillas por lo que queda de los partidos políticos, también por el desprestigio de la clase política y en especial del congreso, y por la coyuntura de un posible giro en la ideología y la forma de cómo se ha venido rigiendo el destino de los colombianos. Es el momento de hacer parte de las personas que con responsabilidad toman las decisiones sobre el futuro del país, por lo antes expuesto, lo invito a que elija el candidato que en su criterio represente sus ideales, y el próximo domingo salga temprano a ejercer su derecho al voto.