El hermano menor de Carabalí, un joven de tan solo 23 años, fue asesinado. El acto de violencia ha conmovido a la comunidad del fútbol.
La oscuridad se cierne sobre la familia de Jorelyn Carabalí, destacada jugadora de la Selección Colombia Femenina, mientras el luto y el pesar se apoderan de todos aquellos que la conocen.
Según la información conocida, Carabalí se encontraba compartiendo momentos con amigos en una discoteca local. En un giro inesperado, el joven fue objeto de un ataque a tiros que le arrebató la vida de manera cruel e injusta. Según los informes iniciales, el hermano de la futbolista se dedicaba al negocio de préstamos informales, conocido como «gota a gota», en su vecindario, lo que aparentemente lo puso en desacuerdo con ciertas estructuras delictivas.
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El coronel William Quintero, comandante (e) de la Policía Metropolitana de Cali, proporcionó detalles sobre las circunstancias del trágico suceso. «Lo que se sabe es que se dedicaba al tema de gota a gota donde residía, lo que le generó problemas con algunas estructuras», señaló Quintero en una declaración a Blu Radio.
La devastadora noticia impacta aún más debido al contexto en el que se desarrolla. Jorelyn Carabalí Martínez, hermana de la víctima, formó parte del equipo de la Selección Colombia Femenina que recientemente compitió en el Mundial. La jugadora fue parte del conjunto que luchó en cuartos de final contra Inglaterra, una hazaña que llenó de orgullo a la nación.
La trágica muerte del hermano menor dejó una sombra de tristeza sobre la alegría que habría sido un momento de celebración. Según se informa, el joven asesinado también era conocido por su pasión por la música y ejercía como DJ en eventos locales. Tenía planeado festejar el éxito de su hermana en el Mundial junto a ella, pero esta oportunidad fue cruelmente truncada por un acto de violencia y desprecio.
