La ciudad de Neiva y algunos municipios del departamento se han vuelto el foco del accionar belicista de los grupos subversivos que se han venido fortaleciendo militarmente desde que se posesionó el primer mandatario de los colombianos, Gustavo Petro Urrego. Mientras crecen los escándalos de corrupción que se han venido presentando en algunas regiones del país, los huilenses estamos soportando un verdadero viacrucis por el acoso permanente de extorsiones, intimidaciones y de otros actos criminales que tienen desesperados a las familias huilenses. No hay derecho que el gobierno nacional, tenga descuidado al Huila, a pesar del clamor de los sectores gremiales de la región, de la solicitud permanente del gobernador Rodrigo Villalba Mosquera y de los alcaldes municipales, para que fortalezcan a la Fuerza Pública y al Ejército Colombiano, con el fin de contrarrestar la creciente inseguridad que actualmente se está presentando.
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En algunos municipios, estas organizaciones criminales se pavonean tranquilamente por sus calles y vías rurales. Inclusive ya decretaron toque de queda en los municipios de la Plata, la Argentina y otras localidades. Allí no existe autoridad gubernamental. Hombres del Estado Mayor Central advirtieron que las personas tienen prohibido salir de sus casas después de la hora fijadasiete de la noche, sino se atendrán a las consecuencias de su accionar delictivo en esta zona del territorio nacional. Esto sucede en el gobierno del cambio. El departamento de Huila se ha visto perturbado por las intimidaciones hechas por las disidencias de las Farc, que impusieron esta parálisis a la fuerza. Las advertencias han sido difundidas principalmente entre campesinos, amas de casa y comerciantes mediante mensajes de audio, en el que reiteran restricciones de movilidad nocturna. En ellos también se impartieron órdenes concretas que afectan actividades comerciales y comunitarias en estos cascos urbanos, de acuerdo con los clamores que han esbozado algunos residentes que han expuesto este grave caso de afectación a la movilidad de las personas. Esta imposición afecta directamente al esquema de vida y orden social en estas áreas específicas. que se han visto afectados por extorsiones y homicidios, de acuerdo con el citado medio de comunicación.
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Lo anterior, está generando un panorama incierto para la dinámica económica y por ende para la generación de empleo. Además, cada vez son más las quejas que nos llegan a esta casa editorial por la forma irracional como estas organizaciones exigen fuertes sumas de dinero, las cuales deben ser entregadas en las montañas del departamento. Así expresen lo contrarios los amigos afectos al gobierno nacional. Esa política de la paz total ha sido un sofisma de distracción y un fracaso total. Ya nadie cree en esa retórica barata. Es innegable que estos grupos están tomando inusitado poder, mientras la situación de la población en los territorios con presencia o bajo su control no siempre tiene la relevancia debida por parte del Estado.
