Tras el hallazgo de la bacteria Streptococcus agalactiae en varios cultivos acuícolas, a lo largo del país, y que ha afectado a los productores en el departamento del Huila, el ICA anunció tras el PMU en Neiva y la declaración de emergencia a nivel nacional, la importación de 400 mil dosis de vacuna especializada para esta especie.
Diario del Huila, economía.
Por: Gloria Camargo
El Instituto Colombiano Agropecuario, ha anunciado una medida sin precedentes para hacer frente a una preocupante bacteria que afecta a los peces de cultivo en el país. En un esfuerzo por proteger a la tilapia, una de las especies más importantes para la acuicultura en Colombia, el ICA ha decidido importar 400 mil dosis de vacuna especializada.
En los últimos meses, la tilapia ha enfrentado una amenaza significativa debido a la propagación de una bacteria que causa enfermedades graves y puede ocasionar grandes pérdidas económicas para los piscicultores.
Ante esta situación alarmante, el ICA ha tomado la iniciativa de adquirir un lote considerable de vacunas para combatir la bacteria y proteger a los peces de los efectos devastadores de la enfermedad.
El Gerente (e) de la institución, Juan Fernando Roa Ortiz, fue quien dio a conocer esta importante medida. Recordó que la semana pasada se declaró la emergencia sanitaria en torno al cultivo de tilapia, con el objetivo de reducir el impacto de la mortandad de peces.
En ese sentido, se aprobó la importación directa de las dosis de vacuna del laboratorio Virbac, mientras se avanza en la estrategia de vacunación con Vecol en Colombia. Se estima que las dosis de vacuna llegarán al país en un plazo de tres a cuatro semanas, según lo indicado por el funcionario.
Además, se está trabajando en el desarrollo de una autovacuna bivalente con las cepas aisladas en los brotes detectados en el país por parte del laboratorio Vecol. Esta iniciativa busca fortalecer la capacidad de respuesta y prevenir futuros brotes de la bacteria en la tilapia cultivada en Colombia.
La tilapia es una especie fundamental para la economía colombiana, tanto para el consumo interno como para la exportación. Por lo tanto, es vital tomar medidas rápidas y efectivas para controlar la propagación de la bacteria y evitar las pérdidas económicas que esto conlleva.
El anuncio del ICA ha sido recibido con optimismo por parte de los piscicultores y centros de producción de tilapia en todo el país. Estos actores clave en la industria esperan que la llegada de las vacunas les permita proteger sus cultivos y evitar el impacto negativo de las enfermedades en sus operaciones.
Emergencia sanitaria
El Ministerio de Agricultura, a través del Instituto Colombiano Agropecuario ICA, había declarado la emergencia sanitaria debido a la presencia de la bacteria Streptococcus agalactiae y la necesidad de atender los 43 focos identificados en el país, especialmente en las regiones de Huila, Tolima, Atlántico y Magdalena.
Según había explicado Roa, desde marzo pasado se ha observado un incremento en la mortalidad de peces que excede el promedio anual. Ante esta situación, se declaró la emergencia sanitaria para tomar todas las medidas necesarias como autoridad sanitaria y así reducir el impacto de la mortandad de peces.
Estudios previos han demostrado la efectividad de esta vacuna, y se espera que proporcione una protección significativa contra la bacteria. Además, los productores de tilapia recibirán orientación y capacitación sobre el uso adecuado de la vacuna para maximizar su eficacia y minimizar los riesgos asociados.
El ICA anunció que también trabajará en estrecha colaboración con los piscicultores para implementar medidas adicionales de bioseguridad, fortaleciendo los protocolos existentes y evitando la propagación de la bacteria en los estanques y centros de producción.
Asimismo, se enfocará la aplicación de las dosis en los 43 lugares del país donde se ha detectado un mayor impacto de la bacteria, priorizando regiones como Atlántico, Tolima, Huila y Magdalena.
Consumo humano
La bacteria Streptococcus agalactiae, encontrada en la tilapia ha generado preocupación en el sector acuícola y entre los consumidores. Sin embargo, el ICA ha confirmado que este tipo de microorganismo no ha afectado a otras especies de peces y, lo más importante, no representa un riesgo para la salud humana en caso de consumo.
Ante esta información, también se ha asegurado que los consumidores de tilapia no necesitan reemplazarla por otro tipo de pescado de similar costo, calidad o tamaño. La literatura científica respalda esta afirmación, indicando que el Streptococcus agalactiae serotipo Ia no genera riesgo para la salud.
Es importante destacar que esta bacteria no es zoonótica, es decir, no se transmite de los animales a los humanos. El ICA ha enfatizado que no existe riesgo alguno para la salud humana, ya sea por contacto o por consumo de tilapia infectada.
Es fundamental que la población tenga claro que la presencia de esta bacteria en la tilapia no supone un peligro para la salud. No hay necesidad de temer por el consumo de este pescado, ya que la cepa identificada no tiene impacto en los seres humanos.
No bajar la guardia
Así mismo se ha hecho un llamado a los productores piscícolas para implementar medidas de bioseguridad y controlar la propagación del Streptococcus agalactiae ST7 serotipo Ia, una bacteria que afecta a la tilapia de cultivo en el país.
María Fernanda Serrano, Líder Nacional del Programa Acuícola del ICA, resaltó la importancia de estas medidas y exhortó a los productores a notificar cualquier caso de mortalidad inusual que se presente en sus predios.
Es fundamental destacar que no se ha demostrado que esta bacteria pueda afectar la salud humana, por lo que el contacto con animales infectados o el consumo de tilapia no representa ningún riesgo para las personas. Sin embargo, es necesario tomar acciones para prevenir su diseminación y proteger la producción acuícola.
Entre las recomendaciones del ICA para la prevención y control de la enfermedad se encuentran el manejo productivo adecuado, una buena alimentación para los peces, el tratamiento veterinario oportuno, el manejo de la mortalidad de manera adecuada y la limpieza y desinfección de las instalaciones.
La bioseguridad es clave en la prevención de enfermedades, por lo que el ICA insta a los piscicultores a seguir algunas medidas específicas, como mantener los alrededores del predio ordenados y libres de malezas y utensilios en desuso.
También se recomienda no compartir elementos con otros predios de acuicultura, desinfectar adecuadamente las jaulas, mallas y equipos utilizados antes de realizar una nueva siembra, evitar alimentar a los peces con subproductos de la misma especie y con desperdicios de la alimentación humana, y no desechar la mortalidad en el embalse.
Además, el ICA recuerda a los productores que los alimentos y medicamentos veterinarios utilizados deben contar con el registro correspondiente del ICA, para garantizar su calidad y seguridad.
