Por Fernando Bermúdez Ardila
Escritor e historiador
Nominado premio Nobel de Paz 2010
Debo decir para comenzar, que estuve esperando que los científicos de la política y los políticos de la economía hicieran claridad sobre la propuesta del senador Gustavo Petro de imprimir dinero, sobre la conveniencia e inconveniencia y las posibles consecuencias que esto implicaría.
En primer lugar, es cierto que mensualmente el banco de la República imprime dinero, pero bajo ciertos parámetros con criterio y respaldo, como, por ejemplo, cuando el dinero está deteriorado este es recogido, incinerado y reemplazado. Las divisas enviadas por los colombianos residentes en el extranjero, igualmente son monetizadas en pesos colombianos; El ingreso de divisas de inversión extranjera en Colombia; Los préstamos internacionales al sector público o al sector privado y la extracción de oro que generalmente es comprado por el banco de la República. Además, las divisas producto de las exportaciones de Colombia.
Éstos son uno de los cuantos ejemplos, que por contar con respaldo el banco de la República, no solamente puede, sino que debe y es su obligación imprimir papel moneda para que los valores respaldados estén en circulación en pesos colombianos, pero además de ello, contrario a lo que se predica públicamente se debe hacer una precisión. Los préstamos que el banco de la República hace a los bancos privados, que no es gratuito, pues además de estar respaldados debidamente, el Banco Central recibe unos réditos o intereses que benefician al país.
El banco de la República cada determinado tiempo le entrega al gobierno colombiano parte de los dividendos que percibe de sus negocios. Imprimir dinero sin respaldo, significa una devaluación inmediata del peso, abría una hiperinflación donde los grandes damnificados serían los pobres de Colombia pues el dinero que recibirían por su trabajo quedaría valiendo muy poco o nada.
A lo largo de la historia las experiencias de los países que lo han hecho han sido catastróficas, solo para citar algunos casos servirán los siguientes, en Alemania después de la primera Guerra Mundial y hasta el año 1923 se imprimieron billetes hasta de 100 billones de Marcos; El país entra en una gran depresión y la pobreza fue general donde todo el pueblo padeció de hambre, gran parte de los países sudafricanos destacándose Zimbabue fueron víctimas de este embrujo, y nuestro vecino Venezuela que después de haber suprimido varias veces los ceros a sus billetes hoy un dólar vale 1.900.000 bolívares que es equivalente a lo que recibe una persona como salario mínimo mensual por su trabajo, lo que escasamente le alcanza para comprar una libra de carne.
Para poner un ejemplo doméstico, alguien puede ir y abrir una cuenta corriente a un banco con 1 millón de pesos y recibir una chequera de 100 valga la redundancia cheques, darle un valor a cada cheque de 20 millones de pesos, aproximadamente 2000 millones de pesos en total girado, no significa que esos 2000 millones de pesos y esos cheques valgan eso, pues si no tiene el dinero en el banco o el respaldo con que pagarlos, sencillamente no tiene valor alguno. Tener más dinero circulando no significa que seamos más ricos, por el contrario, significa qué tendremos que llevar nuestro dinero en costales.
Existen conocido adagio popular que reza “el papel puede con todo” pues este refrán no se aplica al papel moneda.