Diario del Huila

Inflación desbordada

Jul 7, 2022

Diario del Huila Inicio 5 Editoriales 5 Inflación desbordada

Las autoridades monetarias del país deben repensar su accionar de seguir subiendo las tasas de interés, con el fin de frenar la inflación en el país, que se encuentra desbordada, provocada principalmente por factores exógenos y no por factores internos. La meta que tenía previsto la Junta Directiva del Emisor del 4% para la presente vigencia, quedó atrás porque el informe presentado el día anterior por el Dane, durante el mes de junio ascendió al 0,51%. Un fenómeno que no es exclusivo de Colombia, pues recorre todos los países del mundo, y su alto impacto ha sido listado como un auténtico cisne negro que obliga a repensar las fórmulas y recetas empleadas por los bancos centrales apegados a manejar la tasas al alza. Hay muchas voces acusatorias contra los economistas de los emisores porque siempre acuden a la misma herramienta en un momento de postpandemia que los obliga al mismo tiempo a irrigar las economías con dinero barato.

En el mes anterior, la inflación anual volvió a tomar este peligroso sendero para la reactivación económica. Esta variación mensual de 0,51 %, es la más alta en 18 años. Lejos de seguir cediendo como lo hizo en mayo, la inflación en Colombia volvió a retomar la tendencia alcista en junio. Este comportamiento fue impulsado por los grupos de gasto de alojamiento, agua y electricidad; alimentos y bebidas no alcohólicas; y el renglón de restaurantes y hoteles. Con ello, la inflación anualizada, es decir, la de los últimos 12 meses con corte a junio, llegó al 9,67 por ciento, mientras que al cierre del primer semestre los precios cerraron con un aumento de 7,09 por ciento. Bastante oneroso para las familias colombianas.

De acuerdo con la entidad encargada de las estadísticas en el país, las mayores variaciones de precios en junio se dieron en el rubro de restaurantes y hoteles, con el 1,06 por ciento; los bienes y servicios a hogar, como productos de aseo, jabón, pañales y peluquería, que fue del 0,96 por ciento; y el grupo de gasto del transporte, cuya inflación del mes fue del 0,76 por ciento. Lo cual evidencia que las presiones siguen, aunque ya no recaen tanto sobre los alimentos. Aunque la ciudadanía percibe que dichos incrementos son superiores a los proferidos por el Dane.

Lo más grave es que la naturaleza de las presiones inflacionarias golpea con más severidad a los hogares más desfavorecidos, que destinan la mayor parte de sus gastos a los alimentos y productos básicos. De hecho, la inflación de los hogares pobres y vulnerables ya superó el incremento del salario mínimo, borrando en la práctica el aumento del 10 por ciento del salario mínimo. Las medidas gubernamentales necesitan de mucho más tiempo y paciencia para que comiencen a mitigar la situación actual.

Tal vez te gustaría leer esto

Abrir chat
1
¿Necesitas ayuda?
Hola, bienvenido(a) al Diario del Huila
¿En qué podemos ayudarte?