La Coordinadora de Mujeres Desplazadas en Resistencia (Comadre) de la organización Afrodes entregó a la Sala de Reconocimiento de la JEP el informe «Violencias basadas en género vividos por mujeres negras en el marco del conflicto armado», el cual documentó 109 casos de niñas y mujeres víctimas de violencia sexual durante la confrontación armada y posterior, es decir de 2012 al 2019.
Para Luz Marina Becerra, secretaria general de Afrodes, acuden a la JEP con la intención de obtener justicia para esos crímenes debido a que por varios años en la jurisdicción ordinaria no hallaron avance alguno.
«En una práctica sistemática que ha afectado y sigue afectando la vida de especialmente las mujeres negras y lo que esperamos es que se pueda avanzar en las investigaciones. Digamos que la justicia ordinaria no ha funcionado frente a estos delitos», manifestó Becerra.
De acuerdo con los datos recogidos en el informe, los mayores perpetradores de esos casos (mayoritariamente ocurridos en el departamento del Chocó) son las extintas Farc y las disidencias que no se acogieron al Proceso de Paz. También entre los señalados se encuentra el Clan del Golfo y el Eln.
«Eso se dio en el marco de las incursiones de grupos a algunas comunidades y ahí empezaban a abusar de algunas mujeres. Algunas veces era en sus casas, o en las fincas o miraban la oportunidad para poder accederlas carnalmente», señaló Becerra.
Según sus estadísticas, dentro del informe el mayor grupo poblacional afectado por esos crímenes fueron las niñas y adolescentes entre los 12 y los 18 años.