Luego del aplazamiento de un día, hoy se realiza otra jornada en esta ciudad, de disfrutar un día sin la circulación de carros y motos de acuerdo con las directrices emanadas de la administración municipal donde serán multados los infractores de esta medida. Son múltiples los beneficios que se obtendrán por esta política pública, que a simple vista es considerada antipopular, pero que, en el fondo, representa un bienestar para la salud de los neivanos y un mejoramiento del ambiente. Se evitarán choques, no habrá heridos, el ahorro en seguros y trámites por accidentes tenderá a cero. Se disminuye el consumo de combustibles y se evitará el derrame de aceites. Igualmente se evitará la emanación de gases contaminantes a la atmósfera. Adicionalmente, se manejará mejor el estrés, porque hay posibilidades de caminar sin tanto ruido, las calles estarán más desocupadas.
A pesar de las críticas de algunos sectores, especialmente del comercio y servicio, por los efectos adversos para el desarrollo normal de las actividades mercantiles, vale la pena que se sigan insistiendo en el desarrollo de estas jornadas, todo lo anterior se traducirá en la reducción de enfermedades respiratorias, visuales, cardiovasculares, que en muchas ocasiones son los detonantes para que ocurran miles de muertes en el mundo. Los neivanos nos veremos obligados a disponer diferentes maneras de movilizarse en el perímetro urbano. Se utilizará la bicicleta, patines, patinetas u otros medios de transporte amigables con el medio ambiente. Observaremos por fin el uso de las recientes ciclovías de manera masiva.
Esta sana actividad, se ha convertido en un símbolo dentro de las sanas costumbres para los neivanos. Será un recuerdo y una impronta que nos dejará, aunque algunos sectores critiquen sin fundamento alguno mejorar la calidad del aire, junto con la estimulación de la movilidad sostenible, vale la pena apostarle a esta iniciativa que debemos respaldar sin restricciones. Es indispensable brindarles a las futuras generaciones un ambiente sano, así no lo quieran aceptar algunos sectores que están acostumbrados a tener paradigmas que van en contravía de las sanas costumbres de la sociedad.
Aunque esta jornada engendra consecuencias de todo tipo en la ciudad, no solo ambientales, sino también, comerciales, económicas, de movilidad, para mencionar algunas, no podemos ser ajenos a las nuevas tendencias funestas del cambio climático. Este fenómeno lo estamos padeciendo todas las familias huilenses por las altas temperaturas que a diario se están presentando.
Por este motivo, queremos hacer un llamado a la reflexión, acerca del día sin carro y moto y su producto positivo en materia ambiental. Contribuyamos y participemos de esta sana actividad, sin discusión alguna. Contribuyamos a salvar al planeta. Vale la pena.
