En un inesperado giro de los acontecimientos, el equipo de baloncesto 3×3 de la Institución Educativa Montessori de Pitalito, Huila, enfrenta la frustración de ver truncado su sueño de competir en la fase nacional de los Juegos Intercolegiados. Tras meses de preparación y sacrificio, estos jóvenes campeones departamentales fueron notificados de su exclusión debido a una decisión administrativa del Ministerio del Deporte, generando descontento entre el equipo, sus familias y la comunidad educativa.
DIARIO DEL HUILA, HUILA
POR: ALEJANDRO POLANCO
Con gran pesar, Leider Ruiz Betancourt, entrenador de baloncesto 3×3, y los padres de familia protestan ante la decisión del Ministerio del Deporte de impedir la participación de estos jóvenes en la fase nacional de los Juegos Intercolegiados. Esta medida ha generado frustración, cuestionamientos sobre la política deportiva en el país y una honda tristeza entre los adolescentes, quienes ven truncado el anhelo de representar a su departamento en un evento de esta magnitud.
Desde inicios de año, el equipo de baloncesto 3×3 de Montessori, liderado por Ruiz Betancourt, se preparó intensamente para llegar a esta etapa. Su esfuerzo ha sido evidente: semanas de arduo entrenamiento, sacrificios de tiempo personal y escolar, así como recursos invertidos tanto por los propios estudiantes como por sus familias, marcaron el recorrido de estos jóvenes que hoy lamentan haber alcanzado el campeonato departamental solo para verse frenados en su progreso.
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Los estudiantes Julián David Puerto, Juan Camilo Bello García, Andrés Santiago Vargas y Yeison David Lozano, todos en su último año escolar, no solo soñaban con un campeonato; muchos de ellos tenían la esperanza de obtener una beca universitaria mediante su desempeño en el torneo. “Nos sacrificamos mucho por este sueño, por representar a Pitalito y al Huila. Nos duele saber que, después de tanto esfuerzo, no vamos a poder demostrar lo que podemos hacer a nivel nacional”, expresó uno de los jóvenes jugadores.
Las fases de la competencia y la sorpresa de última hora
El proceso para llegar a una competencia nacional intercolegiada exige cumplir varias etapas: fase intramural, fase municipal, fase departamental y, finalmente, las fases regional y nacional. Sin embargo, a pesar de que el equipo cumplió cada una de estas etapas, el Ministerio del Deporte emitió una circular a última hora en la que notificó a Ruiz Betancourt y a su equipo que no podrían participar en la fase regional, una decisión que, según las autoridades deportivas, responde a la falta de cumplimiento en el número mínimo de inscripciones de estudiantes para esta categoría en Pitalito.
Leider Ruiz, cuestionó esta determinación. “No entiendo cómo es posible que después de decirnos que podíamos participar en la fase nacional, de cumplir con todas las etapas, nos digan a última hora que estamos fuera”, señaló Ruiz. El entrenador, quien lleva años dedicado al deporte escolar, calificó la medida como una injusticia para los jóvenes que, en algunos casos, han hecho del baloncesto su vía para continuar sus estudios superiores.
Protesta y frustración de padres y jugadores
La situación ha generado gran consternación entre los padres de familia, quienes han sido testigos de los sacrificios de sus hijos para alcanzar el sueño de participar en una fase nacional. Héctor Alfonso Puerto, padre de uno de los jugadores y también docente, expresó su inconformidad al calificar esta decisión como una falta de consideración hacia los jóvenes y sus familias. “Este tipo de decisiones afectan el ánimo y la salud mental de nuestros hijos, quienes se sienten desmotivados y traicionados. Han trabajado arduamente por llegar a la fase nacional, y el hecho de que les digan que no podrán representar al Huila por decisiones administrativas es inaceptable”, afirmó Puerto.
Los padres aseguran que la preparación para este evento no solo ha sido física y técnica, sino que también ha requerido recursos económicos de parte de las familias, quienes han contribuido para cubrir gastos adicionales. Además, los padres de familia lamentan el impacto psicológico que esta situación ha tenido en los jóvenes. Algunos estudiantes expresaron sentimientos de tristeza y decepción, llegando incluso a considerar abandonar la disciplina deportiva ante lo que consideran una falta de reconocimiento a su esfuerzo.
Para el profesor Leider Ruiz y los padres de familia, la medida del Ministerio del Deporte es un reflejo de la poca importancia que se le da al deporte escolar y a las aspiraciones de los jóvenes en este ámbito. “Este es un gobierno que se ha autodenominado el gobierno del cambio, pero parece que no está dispuesto a apoyar el cambio que necesitan estos jóvenes”, declaró Ruiz. Según él, esta decisión pone en evidencia la falta de una política clara y consistente que promueva el desarrollo de nuevas disciplinas deportivas y respalde el talento emergente en el país.
La preocupación de Ruiz y los padres de familia no es aislada, ya que son varios los municipios y departamentos que enfrentan dificultades similares. Sin embargo, este caso específico de Pitalito se ha convertido en un ejemplo del descontento general hacia una política deportiva que, en lugar de incentivar la participación, impone barreras a aquellos que desean representar a su región y alcanzar sus metas en el ámbito deportivo.
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El impacto en el deporte regional: una ilusión que se desvanece
El baloncesto 3×3 es una disciplina relativamente nueva en el país, y los jóvenes de Pitalito tenían la ilusión de ser pioneros en este deporte a nivel regional y nacional. Al truncarse su participación, el Huila pierde una valiosa oportunidad de figurar en el mapa deportivo nacional en una modalidad que ha ganado popularidad y relevancia internacional. Además, el equipo de Montessori, al haber sido campeón departamental, había demostrado su potencial y capacidad para competir a nivel nacional.
La suspensión de su participación no solo afecta sus sueños personales, sino que también envía un mensaje a otros jóvenes interesados en el deporte. Ruiz teme que esta situación desaliente a otros estudiantes que podrían encontrar en el deporte una vía para desarrollarse y evitar problemas sociales. “Es un golpe fuerte para todos nosotros. No solo nos niegan la oportunidad de competir, sino también de demostrar que el deporte es una herramienta de transformación social”, agregó el entrenador.
Los padres de familia, por su parte, también hacen un llamado a las autoridades locales y regionales para que respalden a estos jóvenes y gestionen soluciones que permitan su participación en futuros eventos. Héctor Alfonso Puerto, en nombre de las familias afectadas, expresó su deseo de que el Ministerio del Deporte reconsidere esta medida y adopte una postura que valore y fomente el desarrollo de los jóvenes deportistas.