Aún está fresca en la retina de los aficionados al fútbol en el Huila la imagen del ascenso conseguido en el repechaje por el Atlético Huila. Diario del Huila entrevistó a los dos protagonistas de este logro, el ingeniero Juan Carlos Patarroyo y el técnico argentino Néstor Craviotto. Las finales, los partidos definitivos, la emoción de ascender y lo que viene para el conjunto opita como nuevo inquilino de la Liga Betplay.
Diario del Huila abordó inicialmente al ingeniero Juan Carlos Patarroyo, próximo a cumplir diez años como presidente del Atlético Huila.
Felicitaciones por este nuevo logro, ¿todavía celebrando?
Muchas gracias por las felicitaciones, yo creo que bendecido, este es un regalo que ha dado Dios no solo a mí, sino a todo el Huila, pienso que fue un torneo bien complejo en el que nos metimos de lleno, con el cuerpo técnico, los jugadores, la parte administrativa, teníamos un objetivo y no fue fácil.
Cuatro finales en dos semanas fue todo un trote, en eso tuvo mucho que ver aparte del compromiso, el manejo de la parte física, en los últimos partidos tocó hacer muchos esfuerzos y gracias a Dios nos alcanzó para ascender a la primera categoría.
¿Mas difícil Boyacá Chicó o el Quindío?
Yo pienso que Chicó, fue un equipo muy regular todo el año, con un proceso de casi tres años, el mismo cuerpo técnico, los mismos jugadores, tiene mucho trabajo, es un equipo fuerte, nos costó. Con el Quindío fue fundamental haber sacado la ventaja de 2-0 en el partido aquí, eso fue determinante.
¿La nómina resultó corta, les faltó, pero finalmente les alcanzó?
Nos faltaron dos o tres jugadores en ciertas posiciones, pero aparecieron los muchachos, eso es algo que hay que agradecer, Craviotto les dio la oportunidad a todos los muchachos, muchos de ellos debutaron en el profesionalismo, algunos tenían pocos partidos, ellos nos dieron la mano. Incluso se consolidaron, estoy hablando de Jhon Dave Méndez, neivano, Jhon Lerma, lateral derecho, debutó y se quedó con el puesto, la consolidación de Andrés Amaya, de Yosimar Torres, por ejemplo.
Los dos últimos dos meses y medio fueron de a tres partidos por semana, las finales, todas seguidas, solo dos o tres días de diferencia de un juego al otro, solo recupere y hágale, con esa combinación nos alcanzó, gracias a Dios.
¿Ya están en el proceso de renovar, jugadores, cuerpo técnico y de pensar en refuerzos?
La política nuestra siempre ha sido que cuando se está disputando una final como en este caso, los temas laborales hay que dejarlos a un lado, ni siquiera con el cuerpo técnico tocamos ese tema, porque eso distrae del objetivo, pero ya hoy estamos en eso.
Pienso que hay algunas personas que merecen especial agradecimiento, como el cuerpo técnico y quien no reconoce lo que fue Jhon Figueroa, el arquero al que se le dio la oportunidad, recuerde que era el suplente y nosotros somos los más interesados en su continuidad.
Entre hoy (viernes) y mañana tengo que definir la continuidad de Oscar Néstor Craviotto, anoche charlamos, él quiere quedarse, nosotros también queremos que siga, falta es cerrar el tema económico que es lo que a veces dificulta las cosas.
¿Refuerzos se definen hasta que se confirme el cuerpo técnico?
Si eso es fundamental, aunque ya hemos hablado en el caso de la continuidad de Craviotto, sobre qué debemos reforzar, tenemos una buena base y tenemos que aprovechar eso, esa va a ser la estrategia, lograr la continuidad de cuerpo técnico y jugadores y partiendo de ahí comenzar a mover las fichas que creemos nos hacen falta para conformar un equipo que pelee la categoría.
Frente al estadio, en la A, muy seguramente habrá equipos que dirán “en un estadio en esas condiciones no juego”, ¿qué piensa?
Si en eso tenemos claro que es muy factible que nos saquen de Neiva, porque es algo que no se puede ocultar y no se imagina el guayabo que le produce a uno, por ejemplo terminar el ascenso en un estadio como el de Armenia y mirar que tres día atrás jugó en un cementerio como es el estadio de Neiva, eso produce guayabo como huilense, como amante del fútbol, no hay derecho que una final se juegue en semejantes condiciones y luego ir a otra ciudad y encontrar cosas no muy grandes, pero bonitas, dignas, con garantías para todos, jugadores, directivos.
Estoy cansado del mismo discurso de siempre, basta de aplausos de condecoraciones, yo no necesito de eso, lo que necesitamos es que nos ayuden a armar un buen equipo, pero no han entendido que el Atlético Huila puede ser el camino para que el Huila crezca, que crezcamos todos, esto no es solo del que le gusta el fútbol, como departamento turístico o emprendedor, el Atlético Huila puede ser la herramienta para que todos lo vean.
¿Plaza alterna, Ibagué?
Si, lo más lógico es que sea Ibagué, tenemos muy buenas relaciones con los dueños del Tolima, pienso que es una buena alternativa si se complican las cosas. Anoche me encontré por casualidad con el alcalde de Neiva y le pedí una cita para llevarle unas ideas que tengo, pienso que si hay voluntad el tema del estadio se puede ir arreglando paulatinamente, pretender conseguir $95.000.000.000 millones, y ahí si empezar la obra, primero nos vamos a morir todos nosotros.
Hay unos recursos, podríamos comenzar de a poco, no pueden seguir pasando los años y el estadio cada día más deteriorado, yo tengo unas ideas como ingeniero que soy, voy a hacer el último intento para ir mejorando el estadio paulatinamente.
Con lo del ascenso se puede revivir el tema de un nuevo estadio público privado, nosotros aportamos y tenemos las ganas, es un proyecto viable de menor costo si no cambiamos el chip, vamos a seguir en las mismas.
Finalmente, ¿sigue en venta el equipo, hay propuestas?
Siempre he dicho que mis acciones están a la venta, llegará el momento, por ahora no estoy pensando en eso, todo lo dejo en manos de Dios, estoy contento con el ascenso y ahora el proyecto es armar un equipo para pelear en la primera categoría, conservar la categoría, Dios es el que define cuando debo irme.
Oscar Néstor Craviotto, técnico del ascenso
Bienvenido y gracias por esta emoción que le ha regalado a la afición del fútbol en el Huila.
Fue duro, cuando Juan Carlos me llamó me lo advirtió, va a ser difícil, pero bueno, le apostamos a poder ascender haciendo todo diez puntos, no sé si todo fue 10, pero nos salió como un 9.50, el hecho de entrar al octogonal, luego ganar la primera final, porque si no todo se iba al traste, nos dio la oportunidad de tener dos chances para ascender y lo aprovechamos en la última.
¿sirvió la apuesta de llevar el equipo alterno a Tunja cuando se perdió 0-2 con el Chicó en el primer partido?
Analizábamos, bueno nos salió bien, pero si hubiese sido lo contrario, todos nos habrían criticado, pero analizando el entorno, los jugadores estaban muy cansados, porque normalmente jugaron siempre los mismos, más en los últimos seis o siete partidos, hice muy pocos cambios y los que hacía los realizaba sobre el final, con los cambios el equipo se me echaba demasiado atrás por eso con el cuerpo técnico pensábamos que se mueran los once que empezaron dentro de la cancha, que eran los que nos daban un poco más y nos salió bien.
¿Cree que Quindío le apostó al repechaje para que entre ustedes y Chicó se reventaran?
Creo que ellos intentaron ganarnos, no apostaron, pero igual no les alcanzó y por eso tuvieron que privilegiar el tema del repechaje, querían jugar la primera final con Chicó y tener más chance, pero nosotros tuvimos la fortuna de poder ganar el cuadrangular una fecha antes y poder descansar la nómina titular.
Sebastián Hernández llegó con casi 21 día inactivo, comenzó a jugar casi sin entrenamiento, Gustavo Britos los mismo, 14 días sin entrenar, privilegiamos que tenían una base y fueron jugadores muy importantes para nosotros por lo que necesitábamos que estuvieran dentro de la cancha.
¿Más difícil Chicó o Quindío?
Los dos son rivales difíciles, bravos los dos, distintos a Fortaleza que juega de otra manera, que le apuesta a la tenencia al igual que Real Santander que también trabaja el tema de la tenencia, Quindío y Chicó son equipos más formados que tienen mucha experiencia como quiera que les tocó ascender, descender.
¿Le tocó echar mano de la cantera?
Sí primero porque tenían la condición, tenían algo que me llamó la atención yo les di la oportunidad y se lo ganaron, no le regalé nada a nadie, el que estuvo adentro de la cancha es porque se lo ganó.
Por ejemplo, nosotros íbamos a los entrenamientos de la sub-20 y Jhon Lerma estaba como suplente, hablamos con él y entendió qué queríamos y se quedó con la titular, otros no entendieron, muchos cambiaron para crecer, caso Amaya que en mi anterior paso estaba medio rebelde, lo mandé a la sub-20, hoy me lo reconoce y me dice, “profe me sirvió todo lo que me dijo”, cambió y se convirtió en el capitán del equipo.
Por eso insisto que los que entendieron llegaron caso Lerma, Caso Medina que no había casi entrenado con nosotros y jugó en las finales, veíamos algo en él y respondió.
¿El mito de segundas partes que se dice no son buenas?
Ese lo rompí con el deportivo Pereira y ahora lo corroboré acá en el Huila, cuando llegué acá me dijeron; segundas partes no son buenas y contesté eso ya lo rompí con el Pereira, más que romper un mito lo que eso significa es que hice las cosas bien, trato de ser buena gente, lo que no me gusta es que cuando uno pierde pase a ser mala gente, yo sigo siendo la misma persona, solo que gano o pierdo, siempre hago lo mejor para el equipo.
No ha firmado, pero ¿se quiere quedar siente que lo quieren, que lo aprecian?
Yo en líneas generales estoy muy cómodo, estoy contento, yo lo dije desde el primer día que llegué lo hice con una sonrisa, tanto la prensa como los dirigentes, la gente que trabaja en el club, en Pereira me pasó lo mismo hubo muy buena predisposición, que la gente esté contenta, invita a que las cosas salgan bien y salieron bien en las dos oportunidades, yo contento, hay que esperar, porque tanto el presidente como yo nos concentramos en las finales, yo me dediqué a jugar las finales, ni siquiera ha habido mundial para mí, mi mundial era Quindío, Chicó, toca entonces esperar que piensa el presidente, que presupuesto va a tener para ver qué jugadores se pueden traer, tenemos una base, pero hay que ayudarle.
¿En lo del contrato están en buenos términos?
Con Juan Carlos siempre habrá buenos términos, así me diga que no o yo le diga que no, vamos a tener una excelente relación, lo del contrato no pasa por lo económico, ni siquiera hemos hablado de eso, ayer le dije; “ahora no tengo cabeza para hablar de contratos, usted sabe que conmigo lo podemos hablar por teléfono, si llegamos a un acuerdo lo firmamos y sino nos damos la mano como siempre, como amigos”.
Lo del estadio, ¿tener que jugar en una cancha?
Si es una cancha, esa es una realidad que es una lástima, tenemos eso, la falta de un escenario en buenas condiciones nos privó de la compañía mayor de aficionados, la gente lo hizo y apoyó mucho, fue un jugador más, ahora en primera casi que nos obliga a tener que jugar de visitante en tu propia cancha, ojalá que se solucionara eso.
¿Ahora a encontrarse con la familia, recargar energías para regresar?
Se pone un poco nostálgico y dice; no quiero hablar mucho de ese tema porque me pone nostálgico, así que ahora poder ver a la familia después de cinco meses y medio, bueno nos veíamos a través de la tecnología, pero no es lo mismo, uno necesita del abrazo del cariño, de la contención.
Finalmente, todos esperamos que Craviotto retorne el 3 de enero a iniciar el trabajo de pretemporada con el Atlético Huila ahora de nuevo en primera división.