Doña Irma Mosquera, tal vez por los estigmas e insultos sufridos por ser afrodescendiente, apenas supo que su hija, Irene Marmolejo, fue elegida reina para representar al naciente barrio Las Palmas, sus palabras fueron: “no se ponga hacerse muchas ilusiones, porque a nosotros los negros no nos dejan ganar”, a lo que la hija le contestó: “mamá como no vamos a lograrlo, sí este es un concurso de baile, no de belleza”.
La mujer, recordó que para llegar a ser la soberana, tuvo que como se dice popularmente, ‘remar contra corriente’, pues ya en el Reinado Popular, la favorita era la señorita que representaba al barrio Chicalá, pero como dice la canción del grupo Niche, Buenaventura y Caney: “los cueros van en la sangre, del pequeño hasta el más grande” y tal vez esa herencia del baile que corría por sus venas, le permitió interpretar el Sanjuanero de manera magistral.
‘Los accidentes no existen’
Ya a la edad de 20 años, Irene, se reencontró con sus amigos de infancia, Ramiro Ramos y Alberto Varón, quienes ya eran bailarines.
“El día que llegaron las ‘Rondas Sampedrinas’ al sector, yo era la secretaria del comité de deportes de la Junta de Acción Comunal, y ese puente festivo, los funcionarios estuvieron hacía las 5:30 de la tarde, nos encontrábamos en la final de un campeonato de fútbol y en ese espacio cuando iba a iniciar el segundo tiempo, iban a hacer la selección de la reina en la cancha y como no teníamos energía eléctrica, teníamos prisa para terminar el torneo”, señaló la exreina.
Y debido a que ninguna joven salía a representar al barrio, la banda papayera se encontraba tocando, entonces el presidente del comité, me dijo: “salga usted a ver si nos dejan culminar el campeonato. Cuando salí, esos funcionarios se sorprendieron, y murmuraban, esa muchacha se va a presentar así, porque se encontraba en unos pantalones cortos, ¿qué es eso por Dios?”, recuerda la hoy docente.
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Inició el sueño
Posteriormente, el director de los parejos, le dijo a un joven que era la primera vez que se presentaba de bailarín oficial, ¡vaya usted y preséntese con la joven!
“Colocaron el Sanjuanero e iniciamos a danzar con Carlos Alberto Ramos, y apenas terminamos, ahí si los periodistas, se me acercaron a entrevistarme”, dijo la mujer.
Al día siguiente el presidente de la Junta de Acción Comunal, me indicó, “¿usted de verdad quiere ser la reina?, porque hay otras niñas que quieren serlo, por este motivo vamos a hacer el concurso”.
“No se haga ilusiones”
Tal vez por la discriminación e insultos que recibió, la señora Irma Mosquera, quien había nacido en la ciudad de Cali y madre de la exreina, no quería que su hija sufriera lo mismo y le expresó: “no se ponga hacerse muchas ilusiones, porque a nosotros los negros no nos dejan ganar”, a lo que la hija le contestó: “mamá como no vamos a lograrlo, sí este es un concurso de baile, no es de belleza, yo linda no soy, si fuera hermosa, me iría para el certamen en Cartagena”.
“Y en el público había una candidata favorita, que era señorita del barrio Las Granjas, pero cuando interpreté el baile, a la gente le gustó mi presentación. Yo quería quedar de virreina, porque a ella la enviaban al municipio de Garzón, a representar a Neiva en el certamen de la ‘Alegría’”, recuerda Irene Marmolejo.
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La insultaron
Luego fuimos al desfile que se realiza en el Batallón Tenerife, y allá me entrevistó la periodista Silvia Yunda, quien me preguntó ¿Cómo se siente? Y ella le contestó, que iba a ver como se daban las cosas.
Posteriormente, la mujer llegó a su casa, para descansar, y allí se encontraban los del Comité de Fiestas, quienes la aguardaban para que les diera un aguardiente, a lo que la mujer les explicó que solo les podía dar unas botellas, ya que el restante, era para sufragar los gastos que tenía y una de las obligaciones era cancelarle la confección del traje para presentarse que le había realizado una modista. “Ellos me trataron mal, no me bajaron de ‘hp’, y entonces mi progenitora molesta, les dijo se me van ya de la casa”, recordó la mujer.
La representante del barrio Chicalá
Posteriormente, “me alisté y tomé un taxi de color gris, apenas me subí, llore por los insultos recibidos y el conductor me preguntó ¿Qué le pasa por que el llanto?, y le conté que los integrantes del comité, me habían tratado mal. Me dijo no se preocupe, que usted va a ganar y me pasó un pañuelo”, agregó la exreina.
La mujer recuerda que se encontró con doña Maruja Fernández de Giraldo, quien le comentó: “venga le muestro la corona que se va a ganar la reina popular hoy. “Le dije hay tan bonita, y en mi mente, pensaba, esa es la que me voy a ganar (risas)” y me di cuenta que tenía muchas posibilidades de obtenerla”.
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La hora final
En total era 59 candidatas al Reinado Popularde 1986, por ende los jurados las dividieron en dos grupos e Irene, dio apertura al segundo conjunto.
“Y cuando me presenté, solo recuerdo el ‘pam-pam’ del inicio del Sanjuanero y el de terminar, sentía que bailaba en el aire y cuando finalice la presentación, todo la gente que estaba en el Coliseo, se encontraba de pie, aplaudiendo. Las barras de todos los sectores me apoyaban y ahí me dije, entonces puedo ganar”, agregó la en su momento candidata.
“Luego seleccionaron las diez finalistas, iban en la octava y nada que salía yo, en el noveno turno, dijo el presentador, dijo: las… y colocó el micrófono en dirección al público, a lo que la gente gritó: Las Palmas y el modelador, dijo no, Las Acacias, ya la gente se estaba enojando. Y ahora la última finalista es y volvió a poner el micrófono a los acompañantes, gritó las… Palmas y dijo si señoras y señores, Las Palmas. En ese momento le dije a mi parejo, vamos por la corona y le dije al a Carlos Alberto, ojo que tenemos que ganar, él estaba nervioso”, recuerda la hoy profesora.
“La tercera princesa, fue la señorita del barrio Las Acacias, luego siguió Alfonso López, Pozo Azul, el presentador nombró la virreina es el barrio Chicalá. Ahí dije seguro gané o quedé de última, no sé, (risas) y a los pocos segundos, mencionaron y la Reina Popular del Bambuco es…Las Palmas. Eso fue la locura. Todas las participantes me felicitaron”, relató con orgullo la exreina.
