Con amargura los fanáticos del fútbol hemos visto como se ha escapado la clasificación de la selección colombiana de fútbol al mundial de Catar, con una actuación pobre, malos resultados y dos técnicos que no pudieron liderar el cambio y aglutinar los diferentes egos para un trabajo en común.
La selección se ha visto con un gran problema de liderazgo, no hay ningún jugador que sea el líder natural, que motive al grupo, que sea el faro que ilumine el camino de todos; se nota la falta de trabajo en equipo, sin ninguna táctica, ni sacrificio por los objetivos comunes. El equipo tiene algunas estrellas que son figuras en sus clubes pero que no encajan para un trabajo de corta preparación como los son cada convocatoria para las eliminatorias.
No soy un experto en futbol pero si del trabajo en equipo por eso me atrevo a dar las siguientes apreciaciones de las falencias que hay actualmente en la selección:
- Falta de un director que con su visión transmita lo que se quiere del equipo, que sea capaz de cambiar la estrategia de acuerdo a cada partido y durante el mismo partido.
- No hay un líder natural en la selección; los liderazgos que en otrora tuvieron Falcao o James ya no existen, su momento futbolístico actual es pobre y no hay injerencia de ellos en los nuevos integrantes del equipo.
- Falta de trabajo en equipo buscando solo algunas individualidades que puedan salvar el partido
- Desconfianza de los delanteros por la mala racha de no haber anotado y para mejorar esto se requiere de inteligencia emocional.
Y en definitiva los resultados del equipo reflejan el panorama del fútbol profesional colombiano, con equipos sin presencia en regional en los campeonatos continentales, con una federación carcomida por la corrupción, con maltrato a los jugadores profesionales tratados como mercancía sin derechos ni protección laboral.
Mientras esto siga sucediendo pasarán muchos años para volver a tener un equipo competitivo con liderazgo, compromiso, amor patrio, sentido social y que represente al país de todos.
P.D: La selección Colombia actualmente se parece a determinadas listas de coalición de precandidatos presidenciales, sin objetivos en común y cada uno buscando solo protagonismo y llenar sus egos y bolsillos.