El Congreso de la República aprobó el proyecto de ley de la sobretasa a la gasolina y el Acpm, no por voluntad propia sino porque buscaba resolver una inexequibilidad fallada por la Corte Constitucional, la cual señala que en la Ley 488 de 1998 el legislativo no precisó la base gravable del tributo, sino que delegó esa función en el Ministerio de Minas y Energía.
La base gravable de la sobretasa a la gasolina y el Acpm, en la nueva ley, es determinada por el volumen de venta calculado en galones y se tiene en cuenta en el cálculo el valor de referencia establecido por el Ministerio.
En lo discutido por los congresistas se fijó una sobretasa de 1.270 pesos por galón de gasolina y de 1.775 pesos por galón de extra, es decir los costos adicionales que tienen hoy bajo el viejo modelo, y extenderlos hasta el 2023, año en que la sobretasa aumentará de acuerdo al registro de Índice de Precios al Consumidor (IPC).
En ese sentido, se determinó que la sobretasa a la gasolina corriente en su tarifa general será de 940 pesos por galón en municipios y distritos, y la de la gasolina extra, de 1.314 pesos. Para el caso del Acpm, se busca que se mantenga en 301 pesos por galón hasta 2023, cuando se presentará un aumento de ocho pesos. Y ya para 2024 aumentará a nueve pesos, con lo que en ese año el aumento pasará a representar un valor de 319 pesos.
De lo que se recaude por estos conceptos, será distribuido 50% para el mantenimiento de la red vial y el otro 50% para la red vial de los departamentos, cosa que nos parece muy bien, porque realmente, en lo que respecta a Neiva y el departamento del Huila, no es que se encuentre en muy bien estado y hace un buen tiempo requiere de una ‘manito’ de inversión.
Sin embargo, aunque los recursos tengan su destino de inversión, si no terminan en otros asuntos, a la larga el tema de la sobretasa no favorece mucho a los colombianos en el tema económico, pues al cobrarse este sobre precio, se incrementa el transporte, los productos básicos como los alimentos, por lo que finalmente la sobretasa termina siendo pagado por todos.
Finalmente habría que evaluar qué tan ventajoso resulta que el valor de la sobretasa lo determine el IPC, donde se puede ganar o perder. Amanecerá y veremos.
