La Administración para el Control de Drogas (DEA) mantiene una excepción: el apoyo brindado al fabricante de químicos Stepan Company. La principal responsabilidad de la DEA es luchar contra la propagación de drogas en los Estados Unidos. Este último puede importar hojas de cocaína bajo el nombre de The Coca Cola Company gracias a un permiso especial.
Según Daily Mail, una de las principales empresas internacionales de bebidas puede obtener un extracto «descocainizado» de la primera de estas empresas, que tiene su sede en el estado de Nueva Jersey. Los principales productores de la materia prima en América del Sur, a saber, Bolivia y Perú, son de donde se importa.
El periódico británico hizo estimaciones de la actual afluencia anual de plantas a los Estados Unidos desde la década de 1980. En ese momento se estimaron alrededor de 500 toneladas, o alrededor de dos millones de gramos.
Un fabricante de opioides, una clase de medicamento ligado específicamente a los analgésicos que usan los dentistas, también está amparado por la licencia que utiliza Stepan Company para transformar este tipo de hojas.
¿un caso de doble moral?
Según el Daily Mail, así fue como The Coca-Cola Company pudo importar productos que eran «legales» y evitar ser objeto de restricciones en una nación que durante mucho tiempo ha buscado enfatizar su lucha contra las drogas. Existen discrepancias entre lo declarado y lo practicado por algunos conocedores de lo que alguna vez pudo haber sido considerado un «secreto».
«El resultado final es una historia épica y condenatoria de hipocresía: mientras el gobierno lidera la acusación de criminalizar a los 10 millones de personas que mascan coca, simultáneamente ha conspirado con un gigante multinacional (…) para garantizar un suministro interminable de coca a alimentan sus ganancias”, dijo el periodista estadounidense Jeremy Scahill sobre el libro “Una historia secreta del café, la coca y la cola”, escrito por Ricardo Cortés.
