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La vida de un instructor de conducción; entre sus sueños y las vías 

Nov 9, 2022

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Marcos Cristian Jaimes Diaz es un bumangués que llegó hace más de 35 años al Huila, primero a Timaná a trabajar en la radio recién obtenida su licencia de locución. Lo trajo la profesión. Luego se traslada a Neiva por cosas del corazón y de la profesión y termina como instructor y con una escuela de conducción. Todo comenzó al conocer a la que es su esposa y con la que celebraron en compañía de sus hijos 25 años enseñando a conducir en Neiva. 

Lejos estaba en  los planes de Marcos Cristian Jaimes quien se vino para el Huila a trabajar en una emisora de Timaná con licencia del Ministerio de Comunicaciones en ese entonces, hoy de las TIC, que terminaría como instructor de conducción.

“Me vine con la licencia en la mano a trabajar, lo que me trajo fue la profesión, en ese tiempo se necesitaba la licencia para hablar por los medios, la constitución del 91 acabó con la licencia de locución y la tarjeta de periodista”, argumentó.

Después de trabajar durante tres años como locutor en Timaná Estéreo se vino para Neiva, se vinculó con la cadena Caracol, “mientras tanto mi esposa tuvo la brillante idea de hacerse con la escuela de automovilismo Eco Autos y es cuando la profesión se fue inclinando hacia ese campo, ella ya había trabajado con otra escuela y conocía algo del tema”, relató.

Se hizo a la razón social de la empresa que por aquella época tenia como sede el municipio de Campoalegre, se trasladó para Neiva, “comenzamos desde el año 77 a trabajar, son 25 años ya en este oficio que nos ha significado reconocimiento al esfuerzo que es de toda la familia”.

Relata que no ha abandonado la radio, tienen una emisora virtual Ecos de Colombia, “Ahí seguimos”.

El instructor

Para poder ejercer esta profesión debió primero aprender en una escuela certificada para tal fin, tiene licencia B1 y C 1 de instructor que puede capacitar en la conducción de motos y carros, hasta servicio público colectivo.

¿Lo de las licencias y certificados si son serios?

Marcos Cristian Jaimes, dice que lo de los certificados y las licencias entregadas sin ningún tipo de curso son cosa del pasado. “Los alumnos llegaban en la mañana, entregaban los documentos y en la tarde tenían su licencia de conducción, en muchos casos se partía de la buena fe de creerles que sabían conducir”, agregó.

 Para Jaimes las medidas que se tomaron por parte del gobierno Nacional son muy buenas e importantes para el alumno, “tiene que tomar un curso teórico practico, “hoy día decir que esto es rentable y que uno se va enriquecer con esto es mentira, el gobierno se lleva más de la mitad de los recursos que se recaudan, además una exigencia que es uno de los principales controles es que se exige la huella en el momento de homologar la licencia”, sumó.

Junto a su esposa e hijos están al frente de Eco Autos.

 Los motociclistas

Para obtener la licencia de conducción de moto también se exigen 28 clases teóricas y 15 horas de conducción, “la gente tiene que asistir porque es su huella la que se coloca cada vez que se abre o inicia una clase, la persona que dice saber y que no tiene tiempo para asistir a las clases tiene que hacer de tripas corazón para sacar la licencia”, afirmó.

En las clases teóricas se incluyen temas como seguridad vial, mecánica básica, manejo defensivo, señales de tránsito, primeros auxilios y normatividad de transito en Colombia, entre otras.

“Como instructores debemos estar debidamente capacitados para contestar las inquietudes de los alumnos basados en la ley 762 de 2012 que contiene el código de tránsito”, dijo.

En la parte anecdótica recuerda a una enfermera que tomó el curso, comenzó con diez clases, luego dijo que, si podía tomar otras cinco, “me tocó decirle que si porque en las primeras clases no fue capaz de pasar de primera a segunda, luego terminó diciéndole que se podían pasar todo el año adicionando clases y no iba a aprender porque no hacia las cosas como eran. No tienes el deseo ferviente de querer aprender”, le manifestó.

También hay quienes saben conducir, pero manejan un perfil bajo, sobre el particular manifestó; “el conductor se conoce en la arrancada, uno sabe si esta cañando o no, pero siempre se controla desde el doble pedal”.

Finalmente recuerda que están autorizados en capacitar para licencia A 1 y A 2 que es para moto y en B1 y C 1 que es para carros pequeños tanto particulares como de servicio público, tipo colectivo, existen otras escuelas que capacitan para buses grandes, camiones o tractomulas. “Nosotros los latinos tenemos una mala educación vial y en eso tenemos que trabajar”, cerró

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