DIARIO DEL HUILA, ACTULIDAD
La Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena-CAM otorgó la licencia ambiental global al proyecto de explotación del yacimiento de arcilla común, localizado en ocho veredas del municipio de Pitalito.
Con esta luz verde, la Asociación de Ladrilleros de Pitalito-Asolapih, obtiene un logro importante al contar con los permisos ambientales requeridos para el desarrollo de su actividad minera, aprobada por el programa de trabajos y obras de la Agencia Nacional de Minería en las veredas Criollo, El Limón, Llano Grande, El Pedegral, Las Granjas, Risaralda, La Meseta y La Paz del Valle de Laboyos.
Treinta años
El periodo de tiempo de la licencia ambiental otorgado por la CAM es igual al tiempo que la Agencia Nacional de Minería les dio a través de contrato de concesión minera. En ese sentido, la Corporación Ambiental autorizó ambientalmente por un término de 30 años la totalidad de la explotación de cinco bloques y de manera parcial tres bloques de extracción adicionales.
Así mismo, en la parte resolutiva de la licencia, la Autoridad Ambiental excluyó algunos sectores por presentar conflictos biofísicos, por lo que en dichas zonas no será permitida la extracción de material, pese a contar con licencia minera.
De igual forma, el permiso excluyó toda actividad minera en la zona de ronda de protección hídrica (30 metros) de las quebradas o causes existentes en el área de alinderación.
Compensación ambiental
En cuanto a la compensación ambiental, la CAM estableció que el proyecto deberá adquirir 41.7 hectáreas con fines de conservación, las cuales tendrán que ser compradas en los próximos 27 años, teniendo en cuenta las consideraciones y lineamientos que establezca la autoridad ambiental del Huila y siguiendo la normatividad vigente.
Por otra parte, el estudio de impacto ambiental queda condicionado a los impactos ambientales adicionales a los identificados, durante los seguimientos de control que realice la Corporación.
Asolapih debe implementar los planes de seguimiento, abandono y contingencia ambiental, así como realizar acciones dirigidas a la disminución de los riesgos que atenten contra la integridad física del personal que labora en el área de explotación.
Los beneficiarios
Jesús María Artunduaga, representante legal de la Asociación de Ladrilleros de Pitalito explicó que este ha sido un proceso de dos años con planes de trabajos en obras y de manejo ambiental que ha llegado a satisfacción con la licencia.
“Hace más de 15 años, esta asociación de 1.000 familias beneficiadas directamente y 3.000 indirectamente, venimos trabajando en la legalización y formalización minera, pero no fue un camino fácil, tuvimos problemas, pero nos mantuvimos y no perdimos la fe y la esperanza hasta alcanzar la licencia ambiental” puntualizó el representante.
En este mismo sentido, Guillermo Vargas Trilleras, vicepresidente de la asociación, señaló que el tener la licencia ambiental, no solo permite a las 22 empresas asociadas tener una actividad formalizada y trabajar de la mano con las instituciones estatales, sino también proteger los recursos naturales.
“Estamos haciendo un aporte importante en la economía de Pitalito, pero además estamos comprometidos en hacer nuestra actividad de una manera responsable cuidando las fuentes hídricas y aportando al medio ambiente, y de esta forma hacer una minería bien hecha”, relató Vargas Trilleras.