Alfredo Vargas Ortiz
Docente en la Universidad Surcolombiana
Doctor en Derecho de la Universidad Nacional de Colombia.
Ha concluido una de las etapas claves en los procesos de liderazgo en la administración municipal. Se convenció al electorado de que usted fue la mejor elección para ocupar la silla del alcalde saliente. Ahora viene lo realmente difícil: materializar en obras concretas todo aquello por lo que fueron elegidos, en beneficio de los electores.
Mi experiencia docente y administrativa como Secretario de Gobierno, Secretario de Educación de Neiva (reconocimiento a nivel nacional y regional), Secretario General de la U. Surcolombiana, y mi labor como docente e investigador en asuntos gubernamentales durante varios años, me permiten ofrecer, aunque no se me haya solicitado, 10 recomendaciones a los recién elegidos alcaldes del departamento del Huila. Esto es para que sus administraciones destaquen a nivel regional, nacional e incluso internacional.
1. Empalme Riguroso: Tenga cuidado al realizar un empalme riguroso. Seleccione personas con experiencia probada en estos temas, con carácter y capacidad para dejar las constancias necesarias. Incluso, realice compulsas de copias a los organismos de control si es necesario, para evitar heredar problemas que puedan vincularlo a investigaciones por asuntos de los cuales usted no es responsable.
2. Selección del Equipo de Gobierno: Asegure victorias tempranas para los primeros 100 días de gobierno seleccionando un grupo de personas con habilidades excepcionales. Sueño con ver convocatorias públicas de los alcaldes invitando a las mejores personas a formar parte del equipo de gobierno. Al elegir a los mejores, se avanza a pasos agigantados en la administración pública.
3. Diagnósticos Precisos: Profundice en los diagnósticos de los municipios para afinar las propuestas del plan de desarrollo. Considere la disponibilidad de recursos, las competencias del municipio y el equipo humano necesario para ejecutarlos. Realice una amplia convocatoria para que todos los sectores participen y ayuden a priorizar las metas para el municipio.
4. Identificación de Talentos Internos: Identifique personal dentro de la administración con experiencia en la definición y ejecución de proyectos. Algunos de ellos pueden estar subvalorados por razones políticas, desaprovechando su potencial para contribuir a la ejecución del plan de desarrollo.
5. Gestión Estratégica: Prepare una agenda de trabajo ajustada a cada uno de los proyectos definidos en el plan de desarrollo. Identifique aliados estratégicos para la gestión eficaz, ya que muchos proyectos dependen de la colaboración con el departamento, la nación o la cooperación internacional.
6. Agenda Propia: Construya una agenda propia y no se deje imponer invitaciones sociales y eventos superfluos. Los tiempos de celebraciones han pasado, y ahora es momento de trabajar incansablemente por el pueblo en honor a la palabra empeñada.
7. Gestión a Niveles Diversos: Defina una agenda de gestión a niveles local, regional, nacional e internacional. Muchos proyectos del plan de desarrollo dependen de la gestión, por lo que es fundamental contar con un equipo técnico con experiencia en cooperación nacional e internacional para la gestión de los recursos.
8. Seguimiento Preciso: Establezca fechas precisas y cronogramas específicos con metas concretas para cada secretaría y equipo de trabajo. Realice un seguimiento preciso de cada tarea asignada para evaluar la capacidad de gestión y los resultados de los equipos de trabajo. Los cambios en el equipo deben basarse en estas evaluaciones permanentes.
9. Estrategia Mediática: Desarrolle una estrategia mediática que informe continuamente a los ciudadanos sobre los logros alcanzados y, sobre todo, invite permanentemente a participar en los proyectos y campañas de la administración.
10. Prioridad a la Familia: Reconozca que la familia, su esposa e hijos, son el mejor ejemplo y núcleo esencial de la sociedad. Cuando termine la administración, ellos seguirán allí. Asegúrese de reservar tiempo en su agenda para dedicar el tiempo necesario a ellos, ya que la vida juzga cruelmente a quienes abandonan su deber principal: la familia.
