Hay preocupación en la capital del Huila ante el incremento desproporcionado de personas desplazadas por la violencia. Según la Secretaría de Paz del Municipio se tiene un registro de 62 mil desplazados, que han salido de sus territorios buscando proteger sus vidas del recrudecimiento de la guerra.
Diario del Huila, Primer Plano
Neiva registra un preocupante número de más de 62 mil desplazados debido al recrudecimiento de la violencia, lo que complica aún más la situación de orden público en la capital del Huila.
Los desplazados han llegado de municipios del Huila como son Algeciras, La Plata, Tello, Baraya, Argentina y de departamentos limítrofes como el Caquetá, Tolima, Putumayo y el Cauca, zonas donde es de conocimiento público que se agudiza el orden público a raíz del accionar de grupos armados.
La complejidad de la situación, marcada por el aumento de hechos que afectan la tranquilidad ciudadana, fue destacada por Smith Duarte Cano, secretaria de Paz de Neiva. Duarte Cano subrayó que la intensificación de la violencia, especialmente en Neiva y en el sur de Colombia, ha provocado que la capital del Huila continúe recibiendo a una población víctima de desplazamiento forzado.
La secretaria de Paz expresó la creciente inquietud de la administración, señalando que no es suficiente que Neiva atienda a la población que llega; es imperativo que los municipios donde se generan estos hechos victimizantes trabajen en medidas preventivas. Enfatizó que actualmente se está invirtiendo más en la atención de la población desplazada que en la prevención de estos eventos.
En este contexto, la vocera local hizo un llamado a los alcaldes de los municipios circundantes y a las autoridades del departamento para evitar un aumento continuo de esta población vulnerable en los próximos días.
Desde el año 2020, se ha observado un aumento constante en la población de víctimas atendidas en Neiva, donde el 95% son personas afectadas por desplazamiento forzado, principalmente familias compuestas por cuatro miembros, según detalló la secretaria de Paz de Neiva.
Desplazamiento en cifras
Respecto a las cifras de desplazamiento, hasta noviembre de 2023 se han registrado 838 declaraciones, siendo 687 urgentes (ocurridas en los últimos tres meses) y 151 prioritarias (acontecidas hace más de tres meses). Solo en noviembre, se recibieron 102 declaraciones, siendo el 95% casos de desplazamiento, de los cuales 84 son urgentes y 18 prioritarios. La secretaria Duarte Cano destacó que, en promedio, se reciben seis declaraciones diarias.
Los factores que contribuyen al aumento de las declaraciones son el desplazamiento forzado, las amenazas y los homicidios. Con el incremento de asesinatos de líderes sociales, Neiva ya ha reportado dos casos en lo que va de 2023.
En cuanto a los municipios con mayor incidencia de desplazamiento forzado en el Huila, se destacan Algeciras, la zona rural de Neiva, Vegalarga, Tello y La Plata. En el departamento vecino del Caquetá, provienen de los municipios de San Vicente del Caguán, Florencia y Puerto Rico.
Frente a la situación regional y el desplazamiento de las familias, la Defensoría del Pueblo alerta sobre un peligro «inminente» que acecha a la población civil en los corregimientos Balsillas, Guayabal, Central, Guacamayas y Troncales, ubicados en el municipio de San Vicente del Caguán (Caquetá). El defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, subrayó la creciente preocupación debido a la presencia de una Zona de Reserva Campesina, el Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) Óscar Mondragón, y los Resguardos de Altamira y Banderas del Recaibo en estos corregimientos.
Panorama nacional
Desde la puesta en marcha del acuerdo de paz hasta septiembre de 2023, la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha confirmado que en Colombia se ha registrado un desplazamiento masivo o confinamiento cada dos días.
Este preocupante fenómeno ha llevado a un aumento significativo en el número de víctimas de desplazamientos masivos y confinamientos a lo largo del año 2023, cuadruplicando las cifras comparadas con el año 2017, cuando se inició el acuerdo de paz en Colombia.
Según datos proporcionados por el Foro de ONG Humanitarias en Colombia, entre enero y agosto de 2023, un total de 245,672 personas se vieron obligadas a desplazarse debido a la persistente violencia y conflicto en el país.
Giovanni Rizzo, a la cabeza del Consejo Noruego para Refugiados (NRC) en Colombia, dirigió un mensaje contundente a los recién electos alcaldes y gobernadores del país. Rizzo subrayó la necesidad de abordar de manera efectiva los efectos del conflicto armado en Colombia durante el periodo del 2024 al 2027.
Durante su intervención, Rizzo hizo un llamado urgente a las autoridades departamentales y municipales de Colombia, instándolas a identificar y garantizar los recursos humanos y financieros adecuados en sus planes de desarrollo. Solo mediante este compromiso, destacó, se logrará evitar que ninguna víctima quede desatendida. Concluyó su mensaje con este llamamiento a la acción, subrayando la importancia de una respuesta coordinada y efectiva frente a la crisis humanitaria que afecta a miles de personas desplazadas en el país.
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, en su más reciente informe de septiembre de 2023, muestra que los desplazamientos forzados siguen constituyendo una faceta importante del conflicto armado colombiano. Entre el 1 de enero de 2016 y el 31 de agosto de 2023, este instituto compila 1.324.964 de eventos de este tipo. El año 2022 se caracterizó por tener los números más altos de desplazamiento forzado masivo en el periodo estudiado. Estos hechos se relacionan en su mayoría con los enfrentamientos entre grupos armados con gran presencia territorial (AGC, ELN y las disidencias de las FARC-EP). Además, las comunidades indígenas y afrodescendientes componen el 39% del total de las víctimas afectadas por el desplazamiento forzado masivo (mínimo 10 familias o 50 personas).
A pesar de su interés por mostrar que este delito sigue ocurriendo, ponen de manifiesto que hay una disminución del número de desplazados en general en el periodo de los cinco años posteriores a la firma del Acuerdo de Paz, con un promedio anual (2017 – 2021) de 100.000 personas, frente al medio millón de desplazados por año en promedio que se vio en la primera década del siglo XXI.
