Álvaro Hernando Cardona González
Todos estamos pendientes de la denominada Reforma Tributaria que el recién posesionado gobierno con sus mayorías en el Congreso, nos van a imponer. Es decir, lo que viene, es una modificación y adición al Estatuto Tributario Nacional, presentada por el Gobierno y aprobada por su bancada en el legislativo. Será una Ley de la República, resultado de esa conjunción.
¿Qué efectos tendrá sobre el medio ambiente? Hemos tomado apartes de un artículo publicado por Manglar Abogados el pasado 10 de agosto, titulado La reforma tributaria y sus implicaciones en Materia Ambiental (manglarabogados.com) para describir lo más destacado en esta materia.
El Proyecto dice que su intención principal es el mejoramiento de la salud pública y el medio ambiente. Parece que se trata de “mitigar externalidades negativas” generadas por el uso de los recursos naturales; sin embargo, se queda en solo dos problemáticas puntuales: plásticos e impuesto al carbono.
Sobre la primera, la reforma plantea un impuesto sobre productos plásticos de un solo uso utilizados para envasar, embalar o empacar bienes, su valor será el correspondiente a 0,00005 Unidad de Valor Tributario (UVT) por cada gramo de envase, por el valor de la UVT para el año 2022 corresponde a $1,9 por gramo de envase. No es aplicable sobre productos plásticos de un solo uso utilizados para envasar, embalar o empacar fármacos o medicamentos vencidos, y que su hecho generador está en la venta, el retiro para consumo propio o la importación para consumo propio, de estos productos. Este impuesto no sustituirá el de uso de bolsas plásticas, por lo cual en caso de prosperar ambos impuestos serán aplicables.
Queda por resolver “la articulación de este impuesto con las demás normas sobre plásticos de un solo uso, las cuales privilegian el aprovechamiento del residuo y la economía circular. Dice la fuente consultada que “pareciera que este impuesto no incluye estas variables dentro de su aplicación, por lo que de una lectura inicial, valdría la pena que el Congreso incentivara con una eliminación del pago o una tarifa menor el plástico derivado del aprovechamiento, reúso o reciclaje”.
Sobre el impuesto nacional al carbono, este proyecto plantea “un gravamen que recae sobre el contenido de carbono de todos los combustibles fósiles, incluyendo todos los derivados de petróleo y todos los tipos de gas fósil que sean usados con fines energéticos, siempre que sean usados para combustión”. Incluye el carbón en la lista de combustibles gravados por el impuesto (salvo el carbón de coquerías). Aumenta las tarifas para todos los combustibles fósiles, pero continuará vigente la exención para quienes certifiquen ser carbono neutro.
Entonces, la semana entrante, terminaremos estos comentarios.