Andrés Fernando Barrera Guiño, de 10 años de edad, falleció luego de resultar quemado con alcohol en el barrio Puertas del Edén, en el norte de Neiva. El niño llegó al Hospital con quemaduras en más 35% del cuerpo, en el cuello, tórax, espalda y orejas, en donde murió por la gravedad de sus heridas.
De acuerdo a información preliminar, el menor de edad, en el momento que manipulaba alcohol, al parecer hizo contacto con una veladora, lo que le provocó las quemaduras de segundo grado, que le causaron su deceso.
El niño fue auxiliado por un familiar, quien lo trasladó hasta el centro de salud, pero, pese a los esfuerzos de los galenos por salvarle la vida, el pequeño no logró sobrevivir, ya que las lesiones habían comprometido sus órganos vitales.
Se conoció que Andrés Fernando, era estudiante del colegio Gabriel García Márquez.
Las autoridades adelantan la investigación, para esclarecer lo sucedido, para así conocer porque el menor se encontraba manipulando estos elementos altamente peligrosos.