DIARIO DEL HUILA, PANORAMA
El ganadero y empresario Salim Haddad García fue secuestrado el pasado 1 de octubre en su finca del corregimiento de Guateque, jurisdicción de Montería. Las autoridades de Córdoba acordaron entregar hasta 100 millones de pesos de recompensa a quien dé información que conduzca con su paradero.
Haddad García, además de ser ganadero, es accionista de una clínica en Montería y su secuestro estaría ligado con fines extorsivos, de acuerdo con lo manifestado por las autoridades en Córdoba.
“De manera conjunta, la Alcaldía de Montería y la Gobernación de Córdoba hemos acordado entregar una recompensa de hasta 100 millones de pesos para quien nos brinde información oportuna que nos permita recuperar al ganadero Salim Haddad”, señaló el gobernador de Córdoba, Orlando Benítez.
Adicional a esto se hizo la instalación de un Punto de Mando Unificado PMU permanente, se coordinaron las acciones a seguir con la dirección de la Policía Nacional, el Ministerio del Interior y de Defensa, entes que han desplegado todo el acompañamiento y capacidad logística para adelantar las labores en terreno.
Rechazo
La Federación Colombiana de Ganaderos (FEDEGÁN) rechazó de manera categórica el secuestro del ganadero y empresario Salim Haddad García donde los secuestradores, aparentemente, habrían obligado a su mayordomo a citarlo en un punto clave para poder de esa manera, llevárselo con rumbo desconocido.
El presidente ejecutivo de FEDEGÁN, José Félix Lafaurie Rivera, lamentó estos hechos y pide a las autoridades civiles, militares y de policía desarrollar las acciones necesarias para lograr la libertad del ganadero y proteger a su familia.
“Lamentamos mucho que estos hechos se vuelvan a presentar. A su familia nuestra solidaridad y a todos los ganaderos prestarles colaboración. @GaulaPolicia @GaulaMilitares para su pronto regreso. @Fedegan”, publicó en su cuenta de Twitter el dirigente gremial.
De acuerdo con los medios de la región, los delincuentes estarían exigiendo una fuerte suma de dinero por la libertad de Haddad García. En el pasado, esta familia ya había padecido el flagelo del secuestro.