El mes anterior, relaté en mi columna semanal el esfuerzo colaborativo realizado a un grupo de pequeños y medianos industriales de la región, por parte del Consultorio Empresarial y Contable adscrito a la Facultad de Economía y Administración de la Universidad Surcolombiana, liderado por el docente investigador Antonio Germán Castañeda Hernández, quien junto a su equipo de trabajo, lograron que se volviera a revivir la Asociación de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas Surcolombianas, para que se constituya en un fiel exponente defensor de los intereses gremiales ante las instancias nacionales.
Fue así que el pasado martes 2 de noviembre se realizó la Asamblea de Constitución de la nueva seccional de ACOPI, en el Auditorio Olga Tony Vidales de la Universidad Surcolombiana, que se constituyó en el inicio de esta organización gremial, con una amplia participación de empresarios La sociedad huilense se encuentra de plácemes por este sueño anhelado desde años atrás, por parte de este puñado de emprendedores que han logrado sobrevivir a pesar de la implementación incoherente de los instrumentos de la política macroeconómica durante los últimos gobiernos, que han permeado negativamente el desarrollo de estas organizaciones empresariales, sobre todo las pequeñas y medianas. Se espera que este mecanismo de asociación fortalezca en el futuro, la dinámica productiva del departamento.
El docente Castañeda, ha expresado que “es una necesidad del empresariado, más cuando sabemos que nuestro departamento es uno de los más atrasados en materia de desarrollo industrial. Tenemos claro, y los industriales que ya empezaron a participar en este proyecto, que se necesita crecer en materia de empresa y en industria. Una región que no cree industria, que no la fomenta, no tiene esperanza de salir del atraso, de la pobreza y del desempleo”. Totalmente de acuerdo. Debemos focalizar la mirada nacional hacia nuestra región, aprovechando las nuevas ventajas competitivas que nos ofrecen las TICS y la proyección de grandes proyectos de infraestructura que han iniciado su etapa de construcción en la región surcolombiana.
Lo afirmaba en dicha columna, que en el caso de la ruta 45, por fin después de seis años de estar paralizada esta obra por culpa de la irresponsable empresa Concesionaria de Aliadas para el Progreso, que solo se dedicó a cobrar los peajes en los Cauchos y el de Altamira, el gobierno nacional por fin le dio vía libre para su cesión y que permitió iniciar las obras. Esta mega obra nos va a permitir integrar la región central del país con la región surcolombiana y, por ende, con los demás países del sur del continente americano. He aquí una gran oportunidad de los empresarios huilenses para ampliar los mercados hacia estos territorios.
Hay que destacar que dentro de los estatutos aprobados se generó una amplia discusión para defender a las micro, pequeña y medianas empresas de la competencia desleal, las prácticas restrictivas de la competencia y de cualquier otra actividad que atente contra su crecimiento y desarrollo. Otro artículo que deseo resaltar es la de promover procesos de desarrollo sostenibles, sustentables, incluyentes, pluralistas y participativos.
Felicitaciones por esta loable iniciativa. Además, para la Universidad Surcolombiana, es un gran honor apoyar estos procesos. Inclusive se convertirá en otro insumo para aglutinar las sinergias tendientes a obtener la Acreditación Institucional de Alta Calidad de la Universidad y para iniciar el proceso para enrutarnos a la Acreditación Internacional de la Facultad de Economía y Administración, gracias al trabajo articulado de los estamentos universitarios de esta unidad académica, que es la más grande de la Usco, siendo un orgullo para los huilenses.
