No debe ser fácil ser James Rodríguez, definitivamente no. Un país como el nuestro dónde cada quien se cree dueño de la verdad y no acepta otra opinión distinta a la propia, no debe ser nada fácil ser una figura pública, menos una de la magnitud de James Rodríguez, quizá el mejor jugador de fútbol que haya nacido en nuestro país.
A los colombianos suele olvidársenos con facilidad las cosas, el ser desagradecidos es una característica casi qué propia nuestra. Nace una nueva figura, ya sea en el mundo político, deportivo o artístico, los arropamos y subimos al cielo, pero al menor error, directo los enviamos a los sótanos del infierno. Sino pregúntenle a Nario Quintana, al mismo Egan Bernal, al gran Falcao, al expresidente Uribe, a J Balvin, entre otros. Han probado la admiración e idolatría desenfrenada de los colombianos, pero al mismo tiempo el veneno de sus palabras llenas de odio y rencor, como si sacaran todas sus frustraciones al momento de criticarlos.
James Rodríguez probó las mieles del éxito, triunfo y admiración en el 2014, durante y después del mundial, era sin lugar a dudas la persona más amada por todos en Colombia, todos nos sentíamos orgullosos de él, sus goles en tierras brasileras nos hicieron llorar de felicidad, a pesar de la eliminación a manos del equipo local, James realizó un papel memorable, tanto así que quedó goleador del mundial por encima de jugadores como Messi, Cristiano y Neymar. De ahí en adelante su carrera fue subiendo de manera rápida a la cúspide del fútbol, llegó al Real Madrid como una figura de talla mundial, realizó un buen trabajo en las primeras temporadas, pero luego poco a poco su trabajo se fue viendo disminuido. Desde ese momento para acá y sin conocer mucho sus problemas de índole personal y profesional, muchos colombianos, incluyendo periodistas, iniciaron a criticarlo de una manera voraz, salvaje y sin pensar tan siquiera en la persona, en su familia, solo fijándose en el James jugador.
No debe ser fácil trabajar desde tu niñez para darle alegrías a tu país, creces y lo consigues, pero al mismo tiempo inicias a ver, como ese país por el que lo has dado todo, te critica de manera casi que absurda. Todos opinan sin mucho saber, que donde jugar, que cual novia debería tener, etc. Todos creen tener el derecho y la potestad de señalar y criticar y no analizan que al fin y al cabo su vida, es su profesión en la que es muy bueno, además.
Hoy la Selección Colombia, aunque está en zona directa de clasificación, no juega su mejor futbol, en tres partidos no se hicieron goles, no se generó buen juego, no se generó opciones de gol, a raíz de ello muchos ya inician a pedir a James de nuevo, que hasta ahora viene siendo marginado por Reinaldo Rueda. Hoy James debutará en su club, un partido difícil por el rival que tienen y por la plantilla de su equipo, probablemente pierdan, y veremos a muchos criticarlo de nuevo. James representa las ilusiones de muchos niños colombianos de triunfar en el fútbol, de llegar al Real o al Bayer, James es el ídolo de mi generación al igual que Falcao y donde quiera que juegue o este lo vamos a apoyar. Para adelante crack.