El jefe de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz, Roberto Menéndez, agradeció la extensión del periodo de trabajo aprobada por gobierno.
La Misión de Apoyo de la OEA al Proceso de Paz (MAPP) presentó ante el Consejo Permanente de la Organización su informe número 30, en el cual alertó por la crítica situación humanitaria vivida particularmente durante los últimos seis meses del 2020 en departamentos como Cauca y Nariño por cuenta de disputas de grupos criminales.
Ante el plenario y en cabeza de su jefe de Misión, Roberto Menéndez, denunciaron el asesinato de líderes sociales, amenazas sobre los mismos, reclutamiento de menores y otras acciones armadas que persisten en los territorios.
«La Secretaría General deja constancia de las dinámicas de control y disputas territoriales de grupos armados ilegales que ponen en riesgo la integridad de la población civil y de los agentes del estado», señaló Roberto Menéndez, jefe de la Misión.
Además, reconocieron, a su juicio, los esfuerzos del estado colombiano en luchar contra los grupos criminales que por cuenta del narcotráfico siguen sembrando el terror en las poblaciones.
El jefe de misión Menéndez también agradeció la decisión del gobierno de confirmar la extensión del mandato de ese cuerpo diplomático hasta el año 2024 en el país.
Delegaciones como la canadiense por medio del embajador Hugh Adsett expresaron su respaldo a la Misión, y señalaron preocupación ante las denuncias de graves violaciones a los derechos humanos derivadas de esas disputas de grupos armados ilegales.