Nuevamente el territorio huilense vuelve a ser escenario de las mingas indígenas, que se han ubicado estratégicamente en el peaje de los cauchos, impidiendo el cobro de éste, permitiendo la libre circulación de vehículos, lo cual se convierte en una amenaza para la continuación de las obras que adelante la Concesionaria Ruta al Sur, si persisten estas protestas sociales. Estos pueblos que el gobierno nacional los ha instrumentalizados para que sirvan de comités de aplausos y se trasladen a Bogotá para escuchar la retorica barata del presidente Gustavo Petro Urrego, donde les promete esta vida y la otra, pero que los acuerdos que ha firmado con estas comunidades se han convertido en un simple saludo a la bandera. Ellos continúan con los mega problemas sociales y económicos de siempre, que, junto con la situación alterada del orden público, que están viviendo en el vecino departamento del Cauca, por los permanentes asesinatos de lideres sociales, masacres, desplazamientos forzados, atentados terroristas y reclutamiento de menores, que, junto con el incremento exponencial del narcotráfico, se han convertido en detonantes, para estos sectores poblacionales, vivan en una permanente zozobra. Los carteles mejicanos y las organizaciones narcoterroristas
Las promesas incumplidas del gobierno nacional han generado que estas comunidades salgan a protestar en el territorio huilense, donde todavía se respira una relativa tranquilidad. Lo que no es justo, es que tengan intenciones de bloquear las vías del departamento, lo cual provocaría una parálisis en la movilización y de la dinámica productiva en la región surcolombiana. Lo anterior con la anuencia del gobierno del cambio, que se encuentra totalmente desentendido de lo que sucede en las regiones colombianas. Consideramos que no es justo, que trasladen los problemas que se están presentando en el Cauca a nuestro territorio. El gobierno departamental y los municipios no poseen los suficientes recursos para apoyarlos, dado la negligencia del gobierno nacional con estos entes territoriales.
Es importante que el gobierno nacional, asuma directamente la interlocución directa con estas comunidades indígenas. Que se cumplan con los compromisos adquiridos por el presidente Gustavo Petro en avanzar en el cumplimiento de los acuerdos suscritos con los pueblos indígenas, según lo dispuesto en las circulares 029 y 036 de 2024 que se han expedido. No pueden quedar en letra muerta. Por tal motivo, es indispensable que los diferentes ministerios, viceministerios y entidades del gobierno para que participen en el diálogo y la concertación, buscando alternativas en la solución que respeten el plan de supervivencia de los pueblos indígenas en el país. No más incumplimientos. En total, 33 territorios indígenas del Huila se han convocado en el sector del puente Pescador para participar en esta movilización. No hay que seguir con discursos para la vida en la estratosfera y del cosmos. Deben aterrizar y atender todas estas demandas sociales. No es un juego.
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