La menor tenía 5 años cuando empezaron los presuntos abusos. En una ocasión la habría agredido con un cuchillo.
Los elementos materiales probatorios aportados por un fiscal del Centro de Atención Integral a Víctimas de Violencia Sexual (CAIVAS) fueron determinantes para que un juez con función de control de garantías impusiera medida de aseguramiento intramuros en contra de un hombre de 34 años, que en calidad de padrastro, al parecer realizó tocamientos íntimos repetitivos a su hijastra en Neiva (Huila).
Los primeros hechos se habrían presentado en 2015 cuando la menor tenía 5 años y el hoy judicializado al parecer iba a su habitación cuando ella estaba dormida y le realizaba los actos sexuales.
La investigación da cuenta que en algunas ocasiones la víctima al despertarse notaba que no tenía sus prendas de vestir puestas. Así mismo cuando ella no accedia a los tocamientos, el indiciado presuntamente la maltrataba física y psicológicamente.
Estos hechos habrían sido repetitivos, aproximadamente tres veces por mes hasta el año en curso. El 31 de enero reciente, el hombre al parecer la golpeó en el rostro, le dañó la chapa de la puerta para intentar abusarla sexualmente. Ante el rechazo de la víctima, el hoy investigado habría tomado un cuchillo y la habría cortado en la muñeca, hechos que le causaron una incapacidad médica de 10 días.
Según la denuncia, el hombre presuntamente la amenazaba con matarla o golpearla fuertemente e incluso le hacía presenciar golpes y agresiones a su madre.
Como presunto autor de los delitos de actos sexuales con menor de 14 años agravados en concurso homogéneo, violencia intrafamiliar agravada y lesiones personales dolosas agravadas, la Fiscalía imputó al hoy capturado quien no se allanó a cargos.
El 20 de abril, funcionarios del CTI de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) en coordinación con Policía Nacional y Ejército Nacional hicieron efectiva la orden de captura en contra del hoy investigado en vía pública de Neiva (Huila).
