Gloria Camargo
En Colombia, el uso de los pagos digitales ha experimentado un significativo incremento, mientras que la presencia de sucursales bancarias ha disminuido en respuesta a esta tendencia. Según el Reporte de Inclusión Financiera 2022, elaborado por Banca de las Oportunidades y la Superintendencia Financiera, de un total de 14.367 millones de transacciones realizadas en el sistema financiero durante el año pasado, el 73% se efectuó a través de canales digitales. Esta cifra representa un aumento en comparación con el 70,9% registrado en el 2021.
Las transferencias constituyeron el 40% del número total de transacciones digitales en 2022, siendo el 84,9% de estas realizadas por telefonía móvil y el 12,5% a través de internet. Por su parte, los pagos representaron el 29,7% de las transacciones y se llevaron a cabo en todos los canales reportados, siendo internet (44,1%), corresponsales bancarios (24,5%) y oficinas (18,1%) los más utilizados.
Ante esta creciente preferencia por los pagos digitales, las entidades financieras del país han tomado decisiones drásticas respecto a sus canales tradicionales. De acuerdo con Banca de las Oportunidades, el número de oficinas bancarias se redujo en un 9% durante el último año en todos los municipios, a excepción de aquellos intermedios. Sin embargo, el canal de corresponsales bancarios sigue consolidándose en todo el territorio, incrementándose en un 21% el número de contratos de corresponsalía entre bancos y establecimientos como tiendas, papelerías o droguerías.
El informe también destaca el crecimiento exponencial de los corresponsales móviles, cuyo número se multiplicó por más de diez en el último año. Además, el número de datáfonos en el país superó el millón, mostrando un aumento del 19,4%.
En términos de acceso a servicios financieros, el porcentaje total de adultos en Colombia con al menos un producto de crédito alcanzó el 36,2% en 2022, un aumento de 1,8 puntos porcentuales en comparación con el año anterior. Las tarjetas de crédito (22,5%) y los créditos de consumo (20,6%) se mantienen como los productos más adquiridos por los colombianos, seguidos por los microcréditos (6,3%).
A pesar de estos avances, el informe resalta que aún existen desafíos en materia de inclusión financiera. Por ejemplo, solo el 18,1% de las personas que viven en zonas rurales dispersas, el 34,2% de las mujeres y el 26,4% de los jóvenes entre 18 y 25 años tienen acceso al crédito, cifras inferiores al promedio nacional. Además, el uso del microcrédito experimentó una ligera disminución del 0,4% en 2022.
