Por: Faiver Hoyos Hernández
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Un inicio de año agitado afronta el Concejo de Neiva por múltiples situaciones. Primero por la escogencia de Presidente y su mesa directiva, luego por la polémica elección de Personero y sumado a ello los escándalos protagonizados por algunos concejales y los líos jurídicos de otros para defender su curul ante demandas interpuestas, en la mayoría de los casos por contradictores políticos o compañeros de lista.
Sonó en pasillos que el concejal Dagoberto Gómez Méndez tenía todo listo para ser ungido como Presidente, hasta que le visitó el burgomaestre y le hizo retirar su candidatura porque amenazaba, con razón, la posibilidad armónica de tener a alguien de sus afectos, pero además quien podría ayudarle con la consecución de recursos.
Juan Diego Amaya en su recorrido político se ha caracterizado por su templanza, carácter y coherencia. Logró como pocos ser elegido por unanimidad. Sus 19 compañeros, incluido el de oposición, votaron por él. Es un hombre idóneo, joven modesto y con proyección.
Como Presidente de la Corporación enfrenta una tarea gigante. Está en el firme propósito de mejorar su maltratada imagen. La austeridad y sus nefastas instalaciones, que por poco se caen, como andan muchas de las escuelitas. Juan Diego advierte que decidió declararse en Independencia para tomar las decisiones a que haya lugar, aunque reconoce que apoyó de frente la elección del Alcalde German Casagua.
Se le escucha decir, que a Neiva primero hay que organizarla por dentro, posteriormente avanzar con lo fundamental y básico (mejoramiento de vías y escuelas etc), para luego pensar en obras grandes.
Lo inmediato ahora es conocer el nombre del nuevo Personero. El proceso que venía, debió ser reorientado por quejas y recomendaciones jurídicas. Quienes aparecían como favoritos, ya no lo son. Hubo quienes desistieron de presentar entrevista. La evaluación continuará y el clamor es uno solo: que escojan al mejor sin amaños ni padrinazgos políticos.
Y qué decir del escandaloso episodio protagonizado por el concejal Abel Mendoza. Rodó en redes y se hizo viral un video con fajo de billetes y pistola. Aunque explicó a los medios que eso fue del pasado, es claro que la cultura traqueta hace daño a la sociedad y salpica a la Honorable Corporación.
La situación es cruda en otro escenario. Este Concejo afronta algo no tan normal y es que varios de los elegidos podrían dejar sus curules. Hay demandas en curso, la mayoría de ellas por doble militancia, entre otras causales. Se dice que hay procesos contra: Ramiro Vidal, Johan Sted Ortiz, Felipe Trujillo, Yamid Sanabria y Abel Mendoza; entre otros.
Desde afuera, hay quienes cruzan los dedos y encienden veladoras, porque ese espacio les apetece. Está claro, aunque se habla de renovación, las mañas difícilmente se extinguen. Es sin duda, de los más terribles males engendrados en la clase política.