El presidente Gustavo Petro recibió el ‘Gran Collar del Estado de Palestina’, una de las más altas distinciones otorgadas por el gobierno palestino, en una ceremonia encabezada por el presidente Mahmud Abbas y el canciller Riyad Al-Malki. Durante su discurso de aceptación, el mandatario colombiano resaltó la empatía de Colombia hacia el sufrimiento del pueblo palestino debido a sus propias experiencias de violencia y conflicto.
En sus palabras, Petro subrayó la importancia de buscar una solución pacífica y fraternal entre Israel y Palestina, afirmando: “Israel y Palestina tienen que ser hermanos, de alguna manera hay que encontrar el camino, si pueden ser hermanos la humanidad habrá encontrado el camino de la fraternidad definitiva, así que esa búsqueda difícil hay que encontrarla».
El presidente recordó las numerosas condecoraciones recibidas a lo largo de su vida, destacando que esta es «quizás la más valiosa por lo que significa indudablemente«. Petro rememoró sus primeras medallas en el colegio, otorgadas por el padre Pedro, para subrayar el significado personal y simbólico de esta nueva distinción.
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Al abordar el conflicto israelí-palestino, Petro señaló que “no es cualquier acontecimiento el que estamos presenciando, son las señales de un mundo terrible, pero que también debe llenarse de esperanza«. Añadió que el mundo actual está profundamente tensionado por la política, quizás más que en el siglo XX, un siglo marcado por dos guerras mundiales y la revolución socialista.
Petro destacó la gravedad de la situación actual al afirmar que “estamos ya en una guerra, nos han convocado a una guerra, y es: o la extinción de la humanidad, o la revolución mundial por la vida, y lo que se está concentrando en Gaza, en tan pequeño espacio, es la condensación de ese conflicto».
Según el mandatario colombiano, la raíz del conflicto no reside únicamente en Israel, sino en el «gran capital mundial fósil y financiero» que ejerce una opresión insostenible sobre los pueblos. “Lo que dispara no es Israel, es un medio, el que dispara es el gran capital mundial fósil y financiero contra un pueblo que no pueden resistir, aguantar, porque ha sido resistente, porque les han enseñado a todos los pueblos del mundo, que no hay otro camino que la resistencia, algo que ya sabíamos nosotros».
Finalmente, Petro hizo un llamado a una “revolución de la vida”, instando a la humanidad a alzar, tejer, construir y organizar un futuro libre de injusticias. “Nos dirán revolucionarios sí, pero lo somos con orgullo, porque somos la expresión genuina de una humanidad que no quiere cadenas, que no quiere injusticias, que quiere ser libre espíritu entre las estrellas».
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