La Procuraduría General de la Nación ha tomado acción en relación a los trágicos acontecimientos ocurridos durante las manifestaciones del 9 de septiembre de 2020 en Soacha, Cundinamarca.
Los patrulleros de la Policía Nacional, Óscar Alexander Márquez Rojas y Wilmer Andrés Ricaurte Pinilla, han sido formulados con pliego de cargos por su presunta implicación en el homicidio de tres personas durante las protestas.
Los hechos ocurrieron como parte de las manifestaciones que tuvieron lugar en respuesta al procedimiento policial que llevó a la muerte de Javier Ordoñez en Bogotá, lo que generó fuertes confrontaciones entre manifestantes y uniformados.
En su comunicado, la Procuraduría cuestionó la conducta del patrullero Márquez Rojas, señalándolo como responsable de manera posiblemente deliberada y como resultado de un exceso en el uso de su arma de fuego, de la muerte de Anthony Gabriel Estrada Espinoza, y daños a una residencia en el sector.
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Por otro lado, al patrullero Ricaurte Pinilla, gestor de participación ciudadana en la estación de Policía León XIII de la Policía Metropolitana de Soacha en el momento de los hechos, se le formularon cargos por supuestamente manipular imprudentemente su pistola de dotación durante un enfrentamiento entre los uniformados y los manifestantes.
La Procuraduría ha revelado que tres personas perdieron la vida en los hechos investigados, identificadas como Anthony Gabriel Estrada Espinoza, Lorwan Stiwen Mendoza Aya y Cristian Andrés Hurtado, y hasta el momento solo se ha esclarecido la muerte del primero de ellos. Los informes de necropsia realizados por los peritos del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses concluyeron que la causa de la muerte de estas tres personas fue por proyectil de arma de fuego y que sus decesos fueron violentos.
En el contexto de la gravedad de los hechos, la Procuraduría Delegada Disciplinaria de Instrucción para la Fuerza Pública calificó provisionalmente la conducta de los investigados como gravísima a título de dolo para Márquez Rojas y con culpa gravísima en el caso de Ricaurte Pinilla.
