El rincón de Diana
Por: Diana Montes
Estos años fueron un reto para los gobiernos salientes. Fue toda una serie de desafíos enfrentarse a la pandemia del COVID-19, pues la declaratoria de la calamidad no fue fácil, pero permitió la inversión en la implementación de medidas en salud pública y la distribución de las vacunas. Un reto adicional fue rescatar la economía a través de apoyos financieros para las familias más vulnerables.
Otros desafíos que nuestros gobernantes enfrentaron fueron el estallido social y los distintos paros. Situación que cambió el rumbo político del País, pero que afectó gravemente la economía y la seguridad del territorio, elementos como la conciliación y el respeto a la protesta fue un elemento fundamental aplicado por el gobernador del Huila y algunos alcaldes salientes, lo que permitió que no fuera más critica la situación, sin embargo, algunos líderes enfrentan hoy más de una denuncia.
Hoy sufrimos un mayor porcentaje de Inseguridad y violencia, pues el crimen organizado y las disidencias armadas pretenden fortalecerse al punto que hoy vivimos con miedo y garantizar la seguridad de los ciudadanos y al mismo tiempo respetar los derechos humanos ha sido un verdadero desafío.
En resumen, los gobernantes han tenido que enfrentar una combinación de desafíos sanitarios, económicos, sociales y políticos.
Gracias a los gobernantes que se van y que acertaron en la solución de la mayoría de los problemas regionales y locales.
Bienvenidos los gobernantes que inauguran un nuevo periodo, también tienen inmensos desafíos pero si no pierden sus propósitos podrán enfrentarlos con solvencia porque tienen el respaldo del pueblo y la capacidad de solucionar los problemas en lo económico, impulsar proyectos para la seguridad alimentaria, el mejoramiento de la salud, la fortificación de la educación y la ampliación de las fuentes de trabajo así como el acercamiento de los productos agrícolas a su comercialización justa y segura, la preferencia por la protección del medio ambiente y la inversión en infraestructura, implementar la trasformación de materias primas, y mantener los propósitos de transparencia, honestidad y honorabilidad. El pueblo aspira a que las esperanzas de cambio brillen en el panorama de la realidad.