El persistente fenómeno de El Niño ha mantenido en vilo a los expertos y autoridades en Colombia, y ahora los embalses se encuentran en el centro de la discusión debido a su nivel crítico. Según los datos más recientes de XM, hasta el 18 de marzo, el nivel se ubicaba en un preocupante 35,74%, mostrando un continuo descenso que preocupa a los analistas.
Sergio Cabrales, docente de la Universidad de Los Andes, advirtió sobre esta situación: «El nivel de los embalses que alimentan las hidroeléctricas no deja de descender. Actualmente, se sitúan en un nivel de 35%».
A pesar de esta tendencia a la baja, Julio César Vera, presidente de Xua Energy, señaló que aún no se ha alcanzado el nivel de alerta, que se establece en aproximadamente un 27% según regulaciones. Sin embargo, advirtió que con la disminución diaria del nivel de entre 0,4% y 0,5%, a finales de mes podrían alcanzar ese punto crítico.
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Por su parte, Adrián Correa, director de la Unidad de Planeación Minero Energética, aseguró en una entrevista radial con La W que, por el momento, no existe un riesgo inminente para satisfacer la demanda de energía. Incluso en escenarios más adversos relacionados con El Niño, afirmó que el país está preparado para enfrentarlos y cubrir la demanda energética.
Sin embargo, al observar el panorama regional, se observan niveles preocupantes en varias regiones del país. Camila Orbegozo, directora de análisis sectorial y sostenibilidad en Corficolombiana, destacó que la ubicación de los embalses no necesariamente corresponde con la distribución de energía, ya que esta se realiza a través de redes nacionales.
Analistas como Cabrales también señalan específicamente a ciertas hidroeléctricas con niveles muy bajos, como Guavio con un 10,3%, Ituango con un 9,9%, Chivor con un 23,1% y Sogamoso con un 28,5%.
Para contrarrestar esta situación, Julio César Vera explicó que la generación térmica con gas y carbón ha sido fundamental, representando el 38,5% de la generación diaria del país. Aunque esta opción es más costosa, garantiza que el suministro energético no se vea comprometido.
A medida que Colombia enfrenta los desafíos de un El Niño prolongado, el monitoreo constante de los niveles de los embalses y la implementación de medidas para mitigar los efectos se vuelven cruciales para asegurar el suministro de energía en el país.
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