Cilantro Hiperdesarrollado Inemita es el nombre del proyecto que llevan a cabo estudiantes de institución educativa de Neiva con el fin de contribuir con la producción ecosostenible de alimentos.
DIARIO DEL HUILA, NEIVA
Por: Angélica Tatiana Andrade Quimbaya
En vista de la necesidad de formular, desarrollar e implementar propuestas de investigación y proyección social con los jóvenes para que avancen hacia el desenvolvimiento cognitivo en los procesos de indagación y exploración que den respuesta a los problemas relevantes de la sociedad, un grupo integrado por estudiantes de la Institución Educativa INEM ´Julián Motta Salas´ de Neiva, viene ejecutando el proyecto denominado Cilandro Hiperdesarrollado Inemita, según explicó la docente de la especialidad agropecuaria, Luisa Fernanda Cortés Montes.
“Los estudiantes reciben doble titulación en el INEM, una es como bachilleres académicos y la otra es la de técnicos agropecuarios certificados por el Centro de la Industria la Empresa y los Servicios, en este contexto, la importancia de implementar este tipo de proyectos radica en que ellos se den cuenta, primero, de lo indispensable que es crear la misma comida que ellos están consumiendo, suministrando o ingiriendo en las casas para que adquieran esos hábitos de sembrar, de estar pendientes de la parte vegetal que va a servir mucho en lo que respecta al impacto ambiental que estamos generando y nos afecta”, esclareció Luisa Fernanda Cortés Montes, docente de la especialidad agropecuaria de la Institución Educativa INEM ´Julián Motta Salas´.
El proyecto inició en su fase de ejecución desde principios del calendario escolar, haciendo parte de él un equipo de cinco estudiantes del grado once, quienes sienten gusto e interés por la investigación, pertenecen a la especialidad de agropecuaria y les agrada el campo, tres condiciones fundamentales con las que deben contar los integrantes del proceso de investigación.
“Que les guste el campo es uno de los requisitos indispensables, ya que en algún momento tendrán que trabajar bajo el sol o bajo la lluvia porque son estudiantes que muchas veces tienen que pasar derecho, salimos a las 12 p.m. y ellos rapidito almuerzan en el salón y continúan trabajando toda la tarde en el proyecto. En ese sentido, más que todo es también el gusto por la naturaleza”, aseveró la docente Luisa.
Reto
Entre los principales retos que han tenido que enfrenar como equipo de investigación está el asunto presupuestal, toda vez que el desarrollo de los proyectos se lleva a cabo con recursos y financiación propios, situación que permite demostrar que los jóvenes terminan desarrollando los procesos por gusto y compromiso.
“La financiación para la implementación de estos proyectos sale del bolsillo de los estudiantes, lo que se convierte en un reto muy grande que, como bien sabemos, hace que, en muchas ocasiones los estudiantes de instituciones educativas públicas opten por dejar de investigar. Tenemos jóvenes a quienes les toca muy duro para poder realizar los procesos de investigación, pero predomina el gusto y el compromiso de poderse graduar de la técnica agropecuaria como tecnólogos y como bachilleres para que así puedan continuar con la profundización en una carrera profesional a nivel de pregrado”, agregó la docente.
En cuanto a los principales puntos que inciden en la satisfacción por los resultados están la oportunidad de enseñar en torno a la naturaleza, formar en temas sociales y ambientales relevantes, además de inculcar el amor hacia el cuidado y la protección de los ecosistemas, acciones fundamentales que repercuten significativamente en la consolidación de hábitos amigables y responsables que conduzcan a la sostenibilidad.
“También buscamos dejarles una enseñanza de amor por la naturaleza y agropecuaria, agrícola que es la parte vegetativa y la parte pecuaria que es la parte de animales y eso es muy satisfactorio escuchar de los estudiantes que les queda una semilla del respeto hacia la naturaleza, de no talar los árboles, de que todos podemos sembrar y en la parte pecuaria, poder brindarles a los animales una mejor calidad de vida, respetarlos y amarlos como se merecen todos los seres vivos”, ratificó Luisa Cortés.
Proyecto
En lo que respecta a la ejecución del proyecto, Juan Esteban Losada Peña, estudiante de la sección 1111 de la institución educativa, manifestó que los avances en el proceso se han logrado tras el trabajo articulado a través de la especialidad que decidió cursar.
“La técnica en agropecuaria nos trata de explicar todo acerca de las funciones del campo, agricultura que tiene que ver con la forma de cultivar y pecuaria, en la forma de tratar animales. El objetivo es saber, identificar y tener certeza de cómo podemos hiperdesarrollar un cultivo de cilandro, pasando de sacarlo en 45 días a la mitad de tiempo debido a que construimos una planta que es la que nos permite mantener la cosecha y tenerla lista en menos tiempo con lo que podemos garantizar oportunidad en los procesos. En todo caso, esto hace que los cultivos se desarrollen más rápido, por ejemplo, un cultivo de 45 días que durará menos”, dijo la estudiante Losada Peña.
En todo caso, hiperdesarrollar las plantas con base en que la mitad del cultivo se desarrolle de manera exclusiva con la luz solar y el resto, estará después de las 6 p.m. con el panel solar, lo cual significa que la planta va a trabajar las 24 horas, día y noche para poder sacar una cosecha que ya no durará 40 días, por ejemplo, sino que podrá sacarse en la mitad del tiempo porque va a estar actuando toda la noche.
“Este proyecto también pretende apostarle al uso en grandes cultivos. La técnica ya existía, pero no es tan conocida porque en sí aplica para todas las plantas, puesto que todas las plantas requieren de la luz solar”, agregó Losada Peña.
Entre tanto, los paneles solares en grandes extensiones permitirían que más cultivos se desarrollen durante la mitad del tiempo habitual, sin afectar la calidad y sus propiedades organolépticas.
“Mi familia se siente muy orgullosa de mí porque estamos buscando la forma de contrarrestar el impacto ambiental y puede revolucionar en las maneras de cultivar en un futuro. Esta rama me interesa, pero me quedo con la parte pecuaria ya que en un futuro quiero profundizar mis estudios en veterinaria, en lo referente al proyecto, ha sido un poco difícil ejecutarlo debido a los problemas financieros porque junto a nuestros profesores hemos hecho todo lo posible por sacar el proyecto adelante” concluyó Losada Peña.
Finalmente, la profesora Luisa destacó el trabajo que se ejerce de manera interdisciplinaria con el docente Félix Charry, ingeniero agrícola encargado de los temas pecuarios en el colegio: “Los estudiantes ya sembraron un pastizal de cilantro en este momento y siempre se deja fijo el panel solar para que siga alumbrando, ya los jóvenes revisan todos los días para registrar cómo es el funcionamiento de la planta y diferenciar de la mitad del cultivo de cilantro cuánto es el crecimiento de la planta con el panel solar y diferenciar el original del hiperdesarrollado”, puntualizó Luisa.
Además de lo mencionado, el grupo de estudiantes dio a conocer que sembraron un pastizal de 3 m x 3 m: “La mini huerta efectivamente es un pedacito de tierra que nos asignó el rector para que nosotros pudiéramos desarrollar los proyectos. Este es el único INEM que queda en el sector urbano que tiene una granja propia ubicada en la vía hacia el Juncal, pero el desplazamiento se nos torna difícil por los estudiantes, por ende, hemos utilizado este pedacito de tierra que nos dejaron acá de la mini huerta, cuyos suelos son muy fuertes fértiles, de hecho ya tenemos algunas plantas de limón, mandarina, maíz y otros cinco proyectos entre los cuales están piscicultura y el de compost en el que los estudiantes se encargan de recoger los desechos que se producen en el restaurante escolar donde se preparan los alimentos del PAE y llevarlos allá para que ese compost sirva del mismo abono de los demás proyectos, lo que garantiza que sea autosostenible, ya que crean el abono, por ejemplo, para el cilantro. Hay otro proyecto que es el del maíz que hasta el momento está en curso la realización de la resiembra puesto que la planta ya estaba grandecita, también tenemos una incubadora para poder ayudar a la granja, tratando de aprovechar al máximo el pequeño espacio del que disponemos”, concluyó la profesora Luisa.