Toda clase de posiciones hay en torno a esta decisión que se dio en la Institución Educativa Misael Pastrana Borrero del municipio de Rivera. Hay quienes defienden la medida y quienes están en contra. La secretaría de Educación Departamental se pronunció.
DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
Todo un revuelo causó las declaraciones de la rectora Olga Narváez de la Institución Educativa Misael Pastrana Borrero del municipio de Rivera en la que le advierte a los estudiantes que no será permitido el portar celulares, así como el uso de piercings y también los noviazgos entre estudiantes, además de que ningún alumno podrá teñirse el cabello y en el caso de los hombres, no podrán tenerlo largo.
Una de las razonas para este tipo de prohibiciones, en especial la del uso de celulares en el entorno escolar se da por el bajo rendimiento de los estudiantes que ha conllevado a la pérdida del año de mucho de ellos, de acuerdo con las declaraciones de Narváez.
La rectora se empara en el Manual de Convivencia para aplicar este tipo de restricciones advirtiendo además que “no se aceptan estudiantes con joyas o accesorios de todos los coleres, gorras y elementos que no van con el uniforme. La libre personalidad va en que yo sea una persona de bien”.
Adicional a esto aseveró que “al estudiante que no le gusten estas reglas, simplemente la Institución Educativa Misael Pastrana Borrero no le sirve, padre de familia, no matricule entonces a su hijo. Si no se quiso cortar el pelo, simplemente retírelo de la Institución, llévenselo para cualquier otra institución, pero acá vamos a exigir presentación personal”, concluyó.
Frente a este tema la secretaría de Educación del departamento del Huila en cabeza de Milena Oliveros Crespo indicó que “el manual de convivencia tiene un blindaje jurídico que lo dice la Ley 115 del 94 en el artículo 87 donde se indica que cuando se inscriben en una institución deben de regirse a las normas de convivencia que es definido por el comité de convivencia”.
A dicho comité pertenece el alcalde del municipio John Jairo Yépes quienes son los que toman las decisiones y se definen derechos y deberes de los estudiantes, pese a esto, “los padres de familia o tutores deben tener en cuenta que al firmar la matrícula son corresponsales de las obligaciones que le derivan y están aceptando de alguna manera las medidas”.
Así como hay padres de familia y personas en general que aplauden la medida, hay muchos otros que sienten que se está violando el derecho a la libre expresión y personalidad, además del derecho a estudiar pues tal y como lo dijo la rectora de la institución, no serán aceptados en este plantel lo cual, podría dejar por fuera a quienes no se adapten a la medida.
Para una de las madres de familia de la institución, la medida es pertinente y se vuelven a los tiempos en donde había autoridad en los colegios “en mi generación estaba la coordinadora en la puerta revisando el corto de la falda, los peinados, y cortes decentes en los chicos, el maquillaje, que uno no tuviera pulseras, ni piercings, los zapatos limpios, camisa encajada, etc. Y nadie se murió. Ahora los pelaos de hoy en día, no se les puede decir nada, porque atentan contra la libre expresión, personalidad, etc., y por eso hoy los padres están dejando a la sociedad una generación de delincuentes, y suena fuerte, pero es la verdad. No los disciplinan en su casa, y quieren pasarse por la faja las normas del colegio. Ya hoy en día no respetan los padres, mucho menos los profesores”.
No lo aceptan
Por su parte, Joel Silva presidente de la Plataforma de Juventud del Municipio de Rivera indicó que las restricciones que aplicará en el centro educativo la rectora son inconstitucionales.
“La Corte Constitucional ya ha versado sobre el asunto. Como presidente de la Plataforma de Juventud del Municipio de Rivera, junto a miembros del Consejo de Juventud, haremos la gestión necesaria para que, a través de un recurso jurídico, se proteja el derecho constitucional vulnerado de los jóvenes y niños que acuden a la Institución Educativa”, sostuvo.
A renglón seguido manifestó que “entiendo las razones de las medidas, pero no son justas y provienen de conductas desesperantes de directivos, docentes y padres que ya no saben cómo educar a los jovenes y niños. La coerción no es el camino”.
Así mismo, invitó a la rectora Olga Narváez para que, en medio de una construcción colectiva de diálogo, “siente con el Consejo de Juventud y la Plataforma para dialogar y encontrar estrategias más oportunas para hacerle frente a la situación disciplinaria y académica de los estudiantes de la Institución Educativa”.
Finalmente, Silva dijo que “las escuelas y colegios deben ser lugares libres a los que acuden sujetos libres para que, libremente, desarrollen al máximo su existencia”.