Ya se acerca el día de apertura de las fiestas de San Pedro en Neiva, las tradicionales celebraciones, que ya llegan a su edición número 60 y hacen parte del patrimonio cultural de la Nación.
Aunque las fiestas sampedrinas no se han cancelado en ningún momento, el año pasado la programación se transformó de tal forma que sus actividades se desarrollaran de forma virtual, pues en junio de 2020 la pandemia estaba en todo su apogeo.
Este año, que se esperaba que el problema sanitario ya estuviera superado, sin embargo no ha sido así y por el contrario la ciudad está entrando en el tercer pico, por lo que las restricciones durante las festividades, que se tendrán que ver de lejitos o desde la comodidad del hogar de manera virtual.
Para muchos la celebración de nuestras fiestas tradicionales, no tienen ningún sentido mientras el pueblo no puede vivirlas de lleno, con todos los eventos como se han hecho a lo largo de estos sesenta años, sin embargo, la idea es mantener viva la tradición, así los espacios y las formas se hayan transformado.
La gran oferta cultural que se ofrece año tras año, incluye música, baile, comparsas, desfiles y gastronomía, se busca reactivar el sector del turismo en la región, que se ha visto minimizado en el último año por cuenta de la pandemia del covid-19.
Igualmente, así los eventos tradicionales se hagan sin presencia de público, los huilenses y turistas que llegarán a pasar la temporada podrán disfrutar de las delicias culinarias en las diferentes muestras gastronómicas que se presentan a lo largo de las celebraciones, o se pueden degustar en el calor del hogar rodeado de los familiares y amigos, obviamente guardando todas las medidas de bioseguridad.
Seguramente no serán las mejores fiestas, vendrán tiempos mejores para que así sean, pero hoy lo importante es mantener vivas las costumbres, elementos socioculturales que se nos han transmitido de generación en generación y que así sean a la distancia nos permitirán vivir la tradición que hace parte del ser huilenses.
Así mismo, aunque el acceso a los eventos no esté permitido, no está de más recordar que debemos cuidarnos y que aunque la movilidad no esté restringida, no debemos irnos de excesos, pues hoy el ‘palo no está para cucharas’.
Finalmente, hay que reconocer que después de meses tan difíciles que hemos tenido que pasar, no solo por cuenta de la pandemia, a quien nunca invitamos y nada que se quiere ir, y todos los efectos que nos han dejado las protestas y la misma crisis económica que también nos ha tocado a todos, unos días de esparcimiento, no están de más. Así que vivamos el San Pedro, así sea virtual.