Sigue recrudeciéndose la situación de violencia en la frontera de Colombia con Venezuela, donde disidencias de las Farc han estado enfrentándose con miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana desde el pasado fin de semana. La situación, que deja al menos 3.000 desplazados, obligó al Gobierno nacional a tomar cartas.
Tras un consejo de seguridad adelantado en el departamento de Arauca, las autoridades colombianas ordenaron, este miércoles 24 de marzo, el fortalecimiento de la presencia del Ejército Nacional en el municipio de Arauquita, por donde han estado llegando la mayoría de los desplazados, a pesar del cierre de la frontera entre ambos países.
“Al término del Consejo de Seguridad en Arauca he dado instrucción al general Mauricio José Zabala de la octava división del Ejército de mantener presencia militar y apoyo a acciones humanitarias para seguir dando tranquilidad a los araucanos en zona de frontera. Aumentamos unidades de Ejército y Policía Nacional”, comentó al respecto el ministro de Defensa, Diego Molano Aponte.