Los investigadores concluyeron que el riesgo de desarrollarlo «es mayor si el sujeto sigue una alimentación poco saludable».
DIARIO DEL HUILA, SALUD
Científicos del grupo de Medicina Preventiva y Salud Pública del Instituto de Investigación Biosanitaria (ibs) de Granada encontraron una posible relación entre el patrón dietético y el riesgo de cáncer de próstata, que aumentaría «con una dieta poco saludable».
El estudio, publicado en la revista científica ‘Cancers’, evaluó la relación entre diferentes tipos de patrones dietéticos, incluyendo uno basado en dieta mediterránea, uno occidental y otro intermedio con el cáncer de próstata.
Los investigadores concluyeron que el riesgo de desarrollarlo «es mayor si el sujeto sigue una alimentación poco saludable».
Este grupo de científicos integrantes, pertenecientes a la Universidad de Granada, el Servicio Andaluz de Salud y la Escuela Andaluza de Salud Pública, estudiaron el patrón dietético de casi medio millar de hombres con cáncer de próstata reclutados en el Hospital Universitario Virgen de las Nieves y el Clínico San Cecilio durante cuatro años.
En la dieta poco saludable hubo consumo de alimentos precocinados, salsas, productos azucarados, dulces y otras grasas comestibles; en la occidental, carnes rojas, procesadas, comida preparada, salsas, alcohol, productos lácteos altos en grasa y cereales refinados.
Y, por último, la mediterránea estuvo caracterizada por verduras, raíces y otros vegetales, así como frutas, pescado blanco y azul, legumbres, patatas, nueces y huevos.
Este equipo, cuyo investigador responsable es José Juan Jiménez Moleón, centra su investigación en conocer la epidemiología de los principales problemas de salud pública actuales en población española, así como sus factores asociados para «la prevención y promoción de la salud, como el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y metabólicas, así como la epidemiología de las lesiones por tráfico».
Cáncer de próstata
El cáncer de próstata es uno de los tumores malignos más frecuentes en el hombre. Resulta muy importante actuar sobre su prevención, donde los hábitos alimentarios pueden tener un papel importante. En actual trabajo de revisión se abordan los principales factores dietéticos implicados tanto en el desarrollo como en la prevención del cáncer de próstata.
Su crecimiento es lento y a veces puede pasar desapercibido por el paciente, en los casos donde dan lugar síntomas, el paciente puede presentar:
- Micción frecuente, especialmente por la noche
- Retención urinaria.
- Ardor o dolor durante la micción.
- Disminución o interrupción del flujo de orina.
- Sangre en la orina o en el semen.
- Eyaculación dolorosa.
- Frecuente dolor en columna lumbosacra, espalda o cadera.
- Dificultad en la erección (4).
La alimentación
Se ha demostrado que la alimentación es un factor clave para prevenir multitud de patologías y propiciar una buena salud. Las grasas saturadas, la carne roja y las bebidas azucaradas se han relacionado con un mayor riesgo de padecer cáncer de próstata.
El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de EE UU ha revelado que la dieta juega un papel fundamental en este tipo de cáncer que afecta a los hombres.
El aumento de tamaño de la próstata, cuya principal función es la producción de esperma, que suele producirse a partir de los 50 años, eleva las probabilidades de sufrir hiperplasia benigna de próstata (problema común entre hombres adultos), prostatitis y cáncer de la próstata.
Este cáncer que afecta a uno de cada nueve hombres en EEUU, ha sido objeto de análisis en multitud de investigaciones. Una investigación de la Universidad de California analizó durante diez años la influencia de la dieta sobre la mortalidad en 926 pacientes con cáncer de próstata.
Ésta reveló que los hombres que siguieron una dieta rica en grasas trans y azúcares presentaban un riesgo 1,8 veces mayor de mortalidad por todas las causas y un riesgo 2,8 veces mayor de mortalidad específica por cáncer de próstata.
Alimentos que propician el riesgo de padecerlo:
Grasas saturadas y trans
Estudio confirma la vinculación entre la dieta mediterránea y el bajo riesgo de sufrir cáncer de la próstata agresivo.
Carne roja
El consumo de carne roja en grandes cantidades se ha relacionado con la incidencia de varias patologías. La Organización Mundial de la Salud ha sugerido que, tanto la carne roja como las carnes procesadas (carne de res alta en grasa, carne de cerdo, carne de almuerzo, perros calientes y salchichas), pueden estar asociadas con un mayor riesgo de desarrollar este cáncer.
Azúcar
Las células cancerosas se pueden alimentar de azúcar, por lo que este ingrediente incide directamente en la manifestación de un cáncer y el mantenimiento y desarrollo de sus células cancerosas. Esto incluye las bebidas azucaradas, las galletas, tartas y demás repostería y la ingesta de carbohidratos procesados, como los de los refrescos y los dulces.