Los retrasos en las obras públicas siguen generando inquietud entre los ciudadanos de Neiva. Esta vez, la atención se centra en la subestación de bomberos tipo II del oriente, un proyecto esperado para reforzar la seguridad en emergencias, cuya entrega se ha postergado nuevamente. Las razones de este aplazamiento, que incluye la falta de equipos esenciales, han puesto en evidencia los desafíos en la planificación y ejecución de este tipo de infraestructuras clave para la ciudad.
DIARIO DEL HUILA, NEIVA
POR: ALEJANDRO POLANCO
La subestación tipo II para el cuerpo de bomberos oficiales en la zona oriental de Neiva, concebida como una obra estratégica para fortalecer la capacidad de respuesta ante emergencias, enfrenta un nuevo retraso en su entrega. Programada inicialmente para el 14 de noviembre, ahora su culminación se ha pospuesto hasta el 7 de diciembre debido a la falta de equipos esenciales para su puesta en funcionamiento.
Este nuevo aplazamiento ha generado preocupación en la ciudadanía y entre representantes del Concejo Municipal, quienes han advertido sobre las posibles implicaciones de los continuos retrasos para la seguridad en la comuna 10 y otros sectores beneficiados por la obra.
El proyecto de construcción de la subestación tipo II se enmarca en el Contrato de Obra Pública No. 3486 de 2022, firmado entre el municipio y el Consorcio Estación 2030, con un costo final de 8.263 millones de pesos, cifra ajustada tras incluir adiciones presupuestales. La obra, considerada prioritaria para mejorar la atención de emergencias en Neiva, se inició en el gobierno anterior y desde entonces ha enfrentado varios ajustes en los plazos de entrega.
Aunque originalmente se proyectó su entrega para abril del año en curso, los tiempos iniciales resultaron insuficientes para finalizar una obra de esta envergadura. Posteriormente, se estableció el 14 de noviembre como fecha de culminación, sin embargo, la falta de equipos clave, como una bomba de 20 caballos y sensores para la red de incendios, han llevado a extender el plazo hasta diciembre.
Preocupación ciudadana
El concejal Alejandro Serna se ha sumado a las voces de la comunidad que manifiestan su inquietud por el constante aplazamiento de la entrega. Serna destacó la importancia de cumplir con la nueva fecha establecida, señalando que esta es la tercera vez en el año que se modifica el cronograma.
“Nos preocupa que esta obra, que es esencial para mejorar la capacidad de respuesta en emergencias en la comuna 10 y sus alrededores, siga acumulando retrasos. Es fundamental que el 7 de diciembre sea la fecha definitiva, ya que los ciudadanos necesitan garantías de que esta subestación entrará en funcionamiento cuanto antes”, comentó Serna.
El cabildante también señaló la necesidad de dotar la subestación con personal capacitado y recursos adecuados para atender de manera eficiente las emergencias. En una reciente visita al sitio de construcción, Serna realizó observaciones técnicas y manifestó su inquietud por algunos detalles de la obra que podrían complicar aún más su culminación.
Respuesta desde la administración municipal
María Amelia Monroy, de la Oficina de Gestión de Riesgo de Neiva, confirmó que “la estación de bomberos será entregada antes de finalizar el mes de diciembre. Algunos tramos aún están en obra blanca, pero se están mejorando la red de incendios y otros elementos claves para garantizar una respuesta inmediata en emergencias bomberiles”.
Así mismo la funcionaria manifestó que la obra tiene un avance del 96% y recordó que las prórrogas están contempladas bajo los parámetros que la ley establece “Con esta nueva estación, la capital huilense contará con más de tres sedes de bomberos, las cuales podrán atender en tiempo récord las emergencias que se presenten en las comunas 5, 7, 8 y 10”, recordó la Monroy.
Los retos técnicos y presupuestales del proyecto
Desde su inicio, la construcción de la subestación ha enfrentado varios desafíos. El presupuesto original, calculado en 5.200 millones de pesos, sufrió modificaciones que elevaron el costo total a cerca de 8.263 millones, incluyendo adiciones necesarias para completar la obra. Estos ajustes, sumados a problemas de planificación inicial, han derivado en observaciones al contratista y replanteamientos en la ejecución.
Uno de los factores que ha incidido en los retrasos es la carencia de elementos esenciales para el funcionamiento de la subestación, lo que ha llevado a cuestionamientos sobre la efectividad en la gestión del proyecto. Aunque la obra muestra avances significativos en su construcción, los faltantes técnicos han impedido su entrega en los plazos previstos.
La subestación tipo II está diseñada para atender las necesidades específicas de la zona oriental de la ciudad, un área que registra un crecimiento poblacional acelerado y requiere una infraestructura robusta para garantizar la seguridad de sus habitantes. Este proyecto no solo beneficiará a la comuna 10, sino que también fortalecerá la capacidad operativa del cuerpo de bomberos en situaciones de emergencia que puedan surgir en sectores aledaños.
Además de su importancia operativa, la comunidad ha depositado grandes expectativas en esta obra, dado el impacto positivo que representará en términos de tiempo de respuesta y atención a emergencias. Sin embargo, los reiterados aplazamientos han minado la confianza en la gestión de la construcción, lo que obliga a las autoridades municipales y contratistas a priorizar su finalización.
Llamado al cumplimiento de los compromisos
A medida que se acerca la nueva fecha de entrega, los ciudadanos y el Concejo Municipal se mantienen vigilantes. Serna, en representación de los intereses comunitarios, ha solicitado mayor celeridad en los procesos administrativos y técnicos que permitan la entrega oportuna de la subestación.
“Esta obra no puede convertirse en un ejemplo más de proyectos que se dilatan indefinidamente. Neiva necesita que esta subestación entre en operación cuanto antes, y por ello estaremos atentos a que el plazo del 7 de diciembre sea definitivo”, afirmó el concejal.
Por ahora, la expectativa se centra en que el consorcio a cargo logre cumplir con los compromisos asumidos y que la comunidad pueda contar finalmente con esta infraestructura estratégica. La subestación no solo representa un avance en materia de seguridad, sino que también simboliza el compromiso de las autoridades con la calidad de vida de los habitantes de la capital huilense.