Por: Adwar Casallas
Hace 2 semanas el gobernador del estado de Indiana Eric J. Holcomb anunció por primera vez en la historia de Estados Unidos la creación de un programa llamado -Desarrollo y Aceleración Económica Regional de Indiana- READI (su sigla en inglés), donde destinará 500 millones de dólares en asignaciones estatales para promover inversiones estratégicas para hacer del estado de Indiana un “imán” para el talento y el crecimiento económico de la región (The Times, 2021).
Lo interesante de este asunto es que puso a competir a las empresas locales a implementar una estrategia para atraer el mejor talento mediante el modelo de marca empleadora o “employer branding».
Pero ¿qué es una marca empleadora? Cuando se habla de esto, muchos piensan en beneficios laborales, compensaciones y otros en salarios altos que les pudiera dar la empresa, en sí un abanico de opciones.
Pero la definición de “employer branding” se define como una estrategia a largo plazo dirigida a gestionar el conocimiento y las percepciones de los empleados -actuales y potenciales- acerca de una empresa en particular (Sullivan, 2004).
De esta manera, la marca del empleador genera un enfoque que permite a la empresa a diferenciarse de otros empleadores y obtener una ventaja competitiva en el disputado mercado del talento.
Y existen varias estrategias que a veces se confunde que con pagar un salario más alto puede ser una marca empleadora y no es así. Aunque no hay unas estadísticas puntuales al respecto, sería interesante conocer que tanto es la rotación de personal tanto en empresas que pagan salarios altos como en empresas que no lo hacen. Sin embargo, para el año 2015, en plena crisis por la caída de los precios del petróleo, el ministerio de Trabajo en Colombia recibió cerca de 100 solicitudes de empresas nacionales y extranjeras para poder retirar personal de su nómina, y el 65% eran empresas que pagaban salarios por encima del promedio del mercado laboral. (Brayan Trujillo, Daniela Villamizar y Diana Diaz, MBA Javeriana, Investigación).
En vez de tener salarios muy altos, otras empresas han puesto en marcha estrategias como promover una cultura empresarial, promover indicadores de desempeño razonables (KPIs SMART), brindar un mejor bienestar y beneficios al empleado, ambiente laboral, entre otros (Forbes, 2021).
Esto permite al empleado trabajar más por convicción que por obligación y los resultados son beneficiosos en materia de calidad e inclusive mejoran los ingresos de la empresa.
Otras organizaciones atraen talento por su reputación y marca reconocida como es el caso de Alquería, empresa colombiana próxima a convertirse en Empresa B, alineada a metas de negocios con aspectos ambientales y sociales. Según el Coordinador de Sueños de Alquería Carlos Cavelier, “a la gente le importa saber cómo es la compañía que está detrás de los productos que compra, cómo actúa frente a sus empleados, a sus proveedores y si cumple la ley en donde opera. Talento atrae talento. (Cavelier, 2021)