A punto de cumplir dos meses desde su anuncio, el Gobierno aún no ha puesto en marcha el plan de compensación de la gasolina a los taxistas, ya que no ha alcanzado la meta de conductores que esperaba.
Diario del Huila, Panorama
En Neiva, la capital del departamento del Huila en Colombia, la comunidad de taxistas se muestra escéptica frente a la propuesta del Gobierno Nacional para compensar los gastos de gasolina. A casi dos meses de su anuncio, el plan de compensación aún no ha despegado debido a que el número de conductores inscritos está muy por debajo de las expectativas del gobierno.
Hasta la fecha, en todo el país, solo se han inscrito 43,284 taxistas en el programa, lo que representa una cifra considerablemente menor a los 190,000 conductores que el Gobierno tenía previsto beneficiar, descontando a aquellos que utilizan gas natural en lugar de gasolina.
Las regiones que lideran en inscripciones son Bogotá, Antioquia y Valle del Cauca, según los datos disponibles hasta el 22 de octubre.
Poco más de esta información es lo que se ha conocido hasta el momento. El decreto aún sigue cocinándose a fuego lento, aunque se espera que sea publicado en los próximos días o quizás la próxima semana.
El subsidio
El ministro de Transporte, William Camargo, anunció el plan de compensación el 31 de agosto.. En teoría, consiste en otorgar un subsidio por el consumo de gasolina, que se pagaría mensualmente y tendría en cuenta los aumentos en el precio de la gasolina a lo largo del año.
El pago se realizaría a través de plataformas de billeteras digitales del Banco Agrario y Fiduagraria.
Cuando se presentó el programa, el viceministro de Transporte, Eduardo Enríquez, estimó que el costo sería de hasta 25,000 millones de pesos para 190,000 taxistas. Sin embargo, con el número actual de inscritos, el costo se reduce significativamente a 5,695 millones de pesos.
Este costo podría aumentar debido a la necesidad de realizar aumentos adicionales en el precio de la gasolina para cubrir el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), que se ha visto afectado por los aumentos en el precio del barril de crudo Brent debido al conflicto en Oriente Medio.
Eso sí, el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, ha señalado que no se ha aplicado un incremento en el precio de la gasolina el mes anterior debido a las conversaciones en curso con los taxistas. Sin embargo, si no se logran avances en los próximos días, se mantendrá la decisión de no aumentar los precios en noviembre.
Compleja de implementar
Julio César Vera, presidente de Xua Energy, ha expresado que su implementación se ha vuelto complicada y es necesario establecer controles adecuados, aunque la iniciativa es positiva en teoría.
Además, afirma que afirmar que se podría implementar en el corto plazo fue arriesgado, dada la diversidad de actores involucrados y las particularidades de la industria del taxi. También se ha destacado la presión de otros sectores para recibir un trato equitativo.
Por su parte, El líder de los taxistas a nivel nacional, Hugo Ospina, ha aclarado que la comunidad de taxistas no busca un subsidio ni una tarifa diferenciada para la gasolina, sino un cambio en la fórmula de fijación de los precios. Su solicitud es sentarse a dialogar sobre el tema del combustible.
Panorama desalentador
El gremio de taxistas ha convocado a un paro de operaciones en todo el país como medida de presión al Gobierno Nacional debido a sus preocupaciones. Entre las razones para el paro se encuentra la «falta de acción contra la ilegalidad», haciendo referencia a la falta de regulación de las plataformas de movilidad compartida, como Uber o Didi. Vale la pena recordar que la Corte Constitucional desestimó una demanda de Taxis Libres que alegaba competencia desleal en el país.
En Neiva, el panorama es similar al nivel nacional. Oscar Fernando Tapias, presidente de Asoprocontax Neiva, ha comentado que muchos taxistas no se inscribieron en el plan de compensación porque no confían en el Gobierno Nacional, ya que este no ha cumplido con sus compromisos anteriores.
El gremio de taxistas a nivel nacional ha planteado dos temas fundamentales: la ilegalidad y el precio de los combustibles. A nivel local, en Neiva, se suman preocupaciones adicionales, como la inseguridad, el mal estado de las vías y otros problemas.
En las conversaciones con la Administración municipal de Neiva, los taxistas presentaron en su momento siete peticiones que, según su líder gremial, no se han cumplido. Estas incluyen la chatarrización de vehículos viejos, señalización de bahías, un sistema único de registro de conductores y la continuidad de un campeonato de fútbol que servía como esparcimiento para la comunidad de taxistas.
Ante el anuncio de un posible aumento en el precio de la gasolina a partir de noviembre, los taxistas en Neiva han expresado que, en teoría, el precio del combustible está congelado para ellos, pero están esperando a ver si este congelamiento se mantiene. Una de las opciones que consideran para mitigar el impacto del aumento es subir las tarifas de los servicios de taxi.
Los taxistas de Neiva forman parte del comité nacional de negociación y están dispuestos a apoyar a sus colegas en Bogotá si las conversaciones no avanzan. Esto podría traducirse en un paro de actividades en la capital del Huila.
