La situación económica profunda que viven más del 40% de la población económicamente activa, está generando un aumento de las actividades por cuenta propia, donde se ven involucrados todos los miembros de las familias colombianas, que se encuentran en estos niveles de pobreza. Somos espectadores en nuestra ciudad, de la inmensa cantidad de niños que son utilizados como fachadas para desarrollar algunas actividades del sector informal de la economía. A pesar de los esfuerzos interinstitucionales que se adelantan por parte de las autoridades encargadas de la protección a los derechos de los menores de edad, todavía se nota la inmisericorde explotación infantil a que son sometidos dichos infantes.
Es loable la estrategia que ha venido impulsando el ICBF, los Equipos Móviles de Protección, las Defensorías de Familia y otras entidades, que junto con las autoridades locales y la Policía Nacional, han venido desarrollando intensas jornadas de búsqueda de niños trabajadores y de sensibilización con los padres de familia, comerciantes, dueños de talleres y transeúntes, para que comprendan que el trabajo infantil es un flagelo que se constituye en una violación de derechos y en una forma de violencia contra la niñez y la adolescencia.
La tasa de trabajo infantil para los hombres fue 6,3%, en el mismo trimestre del año anterior se ubicó en 7,0%. Entre tanto, la tasa para las mujeres fue 3,2%, en el mismo trimestre de 2019 fue 3,6%. Por rangos de edad la tasa de trabajo infantil para la población de 5 a 14 años fue 2,5%, en el mismo periodo de 2019 fue 2,5%. Para la población de 15 a 17 años la tasa se ubicó en 13,3%. En el mismo trimestre del año anterior esta tasa fue 15,2%.
Esta es una decisión que debe ser más contundente para frenar esta práctica que los mantiene alejados del estudio y el juego y que por no atender las políticas implementadas para contrarrestar este fenómeno social, los pone en serio riesgo. Aunque las cifras del trabajo infantil se han reducido ostensiblemente durante el periodo de la pandemia del Covid, se pone de manifiesto que es muy preocupante que ello ocurra en nuestro país.
La protección de sus derechos se ha constituido en una verdadera política pública, para que tengan un mejor desarrollo personal durante esta hermosa etapa de la vida. Y uno de los mayores obstáculos para que ello se cumpla, es el trabajo infantil. Existen diversas causas que lo originan, entre los que se cuentan la inseguridad económica de las familias, lo cual se encuentra relacionado de manera directa con el comportamiento de la economía nacional. Se dedican a trabajar en vez de asistir a la escuela y a vivir plenamente la niñez.