Durante la etapa crítica presentada durante los dos años anteriores por la pandemia del Covid, que provocó el cierre de más de 100 mil micronegocios en el país, y que se reflejaron en las cifras emitidas por el Dane por el alto desempleo que se presentó a durante el 2020, producto de la profunda crisis social y económica que presentó la sociedad colombiana, deprimió a todas las actividades económicas en el país. El comportamiento de la industria y el comercio salió afectado negativamente y que posteriormente se constituyó en una foto del motor de arranque de la reactivación de la economía en el presente año.
Muchas organizaciones pequeñas en los barrios, empezaron a tener un auge que generaron preocupaciones en la alta gerencia de las grandes superficies que sintieron los efectos de la pandemia. Pero no desfallecieron y alguno de ellos, como la cadena de almacenes Éxito, empezó a estructurar estrategias para fortalecerlos en las principales ciudades del país, donde tienen sus centros de operaciones comerciales. Para ello, contrataron a firmas extranjeras para analizar las tendencias del mercado a nivel de las grandes cadenas de supermercados. Igualmente evaluaron las experiencias y exigencias de los consumidores que, durante el periodo de pre y postpandemia, empezaron a generar grandes transformaciones en los nuevos estilos y diseños que debían tener las grandes superficies a nivel mundial.
Y precisamente, esta reingeniería empezó a modificar la estructura y los diseños al interior de los establecimientos para especializar las áreas de acuerdo con las diversas exigencias de los consumidores y las nuevas megas tendencias en la distribución de bienes y servicios. Igualmente se satisfacen los nuevos comportamientos en las demandas individuales, relacionadas con la preservación de los recursos naturales. La distribución y consumo de alimentos orgánicos y las comodidades para adquirir con mucha facilidad, fluidez y rapidez, se convierten en los ejes centrales para mejorar la interacción de los clientes con sus proveedores.
Para tal efecto, buscaron estrategias para apoyar a este importante sector generador de ingresos para la población. Los resultados han sido altamente positivos por el aumento significativo en sus ventas. Sus precios se han vuelto más competitivos e inclusive les ha permitido adquirir a las grandes superficies que han quebrado para readecuarlas a los nuevos esquemas de mercadeo, impulsado por la cadena de Almacenes Éxito. Seguiremos observando en el mediano plazo, estos cambios.
Igualmente, la aplicación de las Tics, en sus procesos de distribución y comercialización, siguen mejorando los niveles de productividad, de esta cadena en el país, que, a la fecha, se han convertido en líderes en este ramo, siendo generadores de nuevos empleos y un facilitador para todos los sectores poblacionales, para que acudan a éstos, a satisfacer sus demandas individuales. Tomarle el pulso al comercio y los servicios es necesario, para poder hacer los ajustes requeridos a fin de acelerar la dinámica de la reactivación de la economía para el presente año. No solo por su contribución al crecimiento, sino también por su aporte a la generación o el mantenimiento de puestos de trabajo.
