EL RINCÓN DE DIANA
Por: Diana Montes
Este 20 de julio no solamente se celebró el Día de la Independencia de Colombia del Imperio Español, sino también el inicio de una nueva Legislatura en el Congreso de la República, lo que marca un nuevo ciclo de discusión de proyectos de ley, además de una nueva junta directiva en ambas cámaras, tanto en Senado como en Cámara de Representantes.
En el Senado quedó como presidente el también presidente del Partido Conservador, el Senador Efraín Cepeda, quien ya ha presidido el Congreso, durante el mandato de Juan Manuel Santos. Aunque ya anunció que no apoya ciertas iniciativas del gobierno nacional, tales como la Asamblea Nacional Constituyente, también hay que decir que no es parte de la oposición extrema, sino que de hecho lideró la adhesión del Partido Conservador a la coalición de gobierno al inicio del mandato del presidente Gustavo Petro.
En la Cámara de Representantes quedó como presidente Jaime Raúl Salamanca, miembro del Partido Verde y representante por el Departamento de Boyacá, quien le ganó el pulso a Catherine Juvinao, también integrante del Partido Verde y representante por Bogotá. Esto fue un choque interno entre las facciones del Verde que más cercanas están al gobierno y las que actúan de hecho como oposición, perdiendo el pulso estas últimas.
Como ciudadanos, esperamos del Congreso leyes de buena calidad y que atiendan los muchos problemas estructurales que tiene el país. Los congresistas no deben medirse por la cantidad de leyes que impulsan, sino sobre todo por su calidad; además, hay otros indicadores, tales como la calidad de las intervenciones en los debates de control político. Que el afán demagógico de presentar ante sus electores “resultados” traducidos en leyes, no lleve a los parlamentarios a proponer leyes mediocres que solamente entorpecen la calidad del debate legislativo.
