La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (Nooa, por sus siglas en inglés) anunció que una posible tormenta geomagnética podría generarse en la Tierra entre el martes 23 y el miércoles 24 de febrero.
Esta previsión se da luego de que se registró una llamarada solar en dirección a la Tierra, la cual, luego de viajar por el espacio, interactuaría con el campo magnético del planeta, sin que esto represente un riesgo para la vida o para las telecomunicaciones.
Eso sí, existe la posibilidad de que la tormenta geomagnética genere auroras boreales en las regiones cercanas al circulo polar ártico, incluso en Canadá.
Estas auroras responden a las interacciones que se dan entre las partículas cargadas energéticamente que vienen del Sol con las que componen el campo magnético, que actúa como un escudo protector de la Tierra.