Diario del Huila

Única condición para el milagro: la fe

Ago 19, 2023

Diario del Huila Inicio 5 Opinión 5 Única condición para el milagro: la fe

LA COLUMNA DE TOÑO

Por el P. Toño Parra Segura                                       padremanuelantonio@hotmail.com  

Este Evangelio del domingo 20 del Año litúrgico es el triunfo de fe en Jesús sobre cualquier otra norma o exigencia.

El Maestro se había retirado a las regiones de Tiro y Sidón, territorio pagano y no ejercía ningún ministerio entre ellos y trataba de intensificar la formación de los doce: “No he sido enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel” (Mt. 15, 24). Esta actitud podría aparecer como incoherente y sectaria de parte de  aquel cuyo mensaje estaba destinado a todos los hombres, especialmente a los alejados e impíos.

La fe sincera de una madre cananea  que pide auxilio por su hija atormentada por un demonio y que nunca antes había visto a Jesús fué tan sorprendente para El que trastornó los planes apostólicos del Maestro: “Mujer que grande es tu fe, que se cumpla lo que deseas” (Mt. 15, 28). Es cierto que su misión tenía que comenzar por los judíos que eran como los hijos predilectos, pero con la condición de que estos ya convertidos hicieran la misión universal. Este fué el verdadero ecumenismo  de Jesús. Los hijos que debían ser fieles y testigos de Jesús, sus paisanos judíos, debían convertir a “los perros” paganos; ese era el lenguaje con que se les trataba, pero la contextura fuerte de la cananea, desde luego también inspirada por el Espíritu adelanta la pedagogía verdadera de la misión católica: “Los perros también comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos” (Mt. 15, 27). Esto rompió todas las normas y disciplinas existentes.

El cristianismo de ayer y de siempre es confiar absolutamente en Jesús Hijo de Dios y entregarse a sus exigencias de transformar la humanidad en fraternidad. La iglesia debe ser el camino de la fraternidad y de este encuentro con Jesús: “es Jesús hecho fraternidad” (Puebla 224).

Hoy la palabra es un llamado fuerte para nuestra Iglesia que lucha y defiende en todos los campos la verdadera y auténtica fraternidad, tan estropeada en todos nuestros ambientes. Ojalá haya menos reproches, menos amenazas, y menos excomuniones. Para muchos cristianos católicos su religión es sólo prácticas, normas disciplinarias y su Iglesia un conjunto de ideas e instituciones  en donde confiar en Jesús y vivir su mensaje parece el resultado de un complicado trámite para un largo camino. Los catequistas y predicadores muchas veces no lo hemos hecho mejor; nos encantan los ritos, desconfiamos de la vivencia de la fe que puede estar mejor cimentada en los paganos, que en nuestras largas ceremonias.

Hablamos mucho de la oración, y ojalá lo sigamos haciendo, pues en la mujer cananea se dan las condiciones que aprendimos en el catecismo: hay que orar con humildad y ella la lleva al extremo, confianza absoluta en el Señor que se le presentaba ocasionalmente, perseverancia a pesar de su aparente rechazo y orar por los otros que se llama “oración de intercesión”: era su hija endemoniada el motivo de su angustiosa súplica. Recordemos que según la actitud de Jesús para entrar en el goce del Reino de Dios no hace falta pertenecer a una raza, cultura o credo religioso, lo esencial para Jesús y también para nosotros es tener fe en Él, a pesar de todo y hasta que obtengamos lo que pedimos.

Nuestra fe se parece a la de la cananea pagana? Dios lo permita y que nos abramos a los demás en un verdadero ecumenismo práctico.

Tal vez te gustaría leer esto

Abrir chat
1
¿Necesitas ayuda?
Hola, bienvenido(a) al Diario del Huila
¿En qué podemos ayudarte?